Por primera vez una investigación logró cuantificar la cantidad de residuos plásticos que cada año llegan al mar en todo el mundo, principalmente de los países costeros que son los que más vierten basura plástica. De acuerdo al estudio realizado por el Centro Nacional de Análisis y Síntesis Ecológico (Nceas) de la U. de California en Santa Bárbara, científicos de la U. de Georgia y el Ocean Conservancy (Washington), entre 4,8 y 12,7 millones de toneladas métricas de basura plástica llega al mar cada año, como parte del mal manejo de residuos que hacen sobre todo los países costeros de todo el mundo y que incluye vertederos clandestinos, el viento que empuja las bolsas plásticas y la basura que los mismos habitantes botan en las costas.
Los investigadores situaron la densidad media de residuos plásticos en el mar de 8 millones de toneladas métricas (8 mil millones de kilos), una cantidad de basura con la que podría cubrir 34 veces el tamaño de isla de Manhatann (EE. UU.) que mide 87 kilómetros cuadrados, explica Roland Geyer, coautor del informe.
"El ingreso anual de basura plástica aumenta cada año, por lo que nuestra estimación para este año es de unos 9,1 millones de toneladas métricas", agrega Jenna Jambeck, ingeniero ambiental de la U. de Georgia y líder de la investigación que hoy se publica en Science. En diez años más se estima que se podría acumular hasta 155 millones de toneladas métricas.
Entre los países que más residuos arrojan al mar está China, Indonesia y Filipinas (ver infografía). De Chile, se estima que anualmente entre 0,01 y 0,25 millones de toneladas métricas de basura plástica, lo mismo que Argentina, Perú, Colombia y Venezuela.
Jambeck explica que los países siempre atienden primero a la necesidad de contar con agua potable y un sistema de tratamiento de aguas residuales porque tienen un mayor impacto en la población, mientras que la acumulación de residuos sólidos (basura) es postergado.
Lo primero que hicieron los investigadores fue estimar la cantidad de plásticos que se produjo en el mundo en el año 2010, la basura total que se generó por habitantes en cada país y la cantidad de plástico contenida en ella. Con esos antecedentes se creó un modelo matemático que permite saber cuánto de ese plástico en la basura aportó cada país para ese año.
"Hacer un retiro a gran escala de esos desechos marinos no es rentable y probablemente sea inviable", indica Geyer. Por lo tanto, es mejor evitar que ese plástico llegue a los océanos "en primer lugar a través de una mejor gestión de los residuos, la reutilización y más reciclaje, mejor diseño de producto y la sustitución de materiales", dice. Entre ellos, según el estudio, son la reducción de residuos y las estrategias de gestión de residuos "aguas abajo", tales como los sistemas de recuperación y ampliación de la responsabilidad ampliada del productor. Según los investigadores, mientras que la infraestructura se está construyendo en las naciones en desarrollo ", los países industrializados pueden tomar acción inmediata de la reducción de residuos y frenar el crecimiento de un solo uso de plástico".
De acuerdo a estimaciones, cada chileno usa más de 200 bolsas plásticas al año, las que en su mayoría terminan en el mar, siendo confundidas con medusas y utilizadas s por la fauna marina como alimento.