La Cámara Chilena de la Construcción (CChC) ajustó su proyección de crecimiento sectorial para el año 2014, reduciendo su estimación de 4% –informada a fines del año pasado– a 1,1% en doce meses y con sesgo a la baja.
Este resultado responde a una menor inversión que se materializaría en los subsectores que componen la industria –Vivienda e Infraestructura–, producto de un escenario macroeconómico más deteriorado, en el cual la actividad, la demanda interna y las perspectivas económicas de los agentes privados continúan corrigiéndose a la baja, según las encuestas de expectativas económicas del Banco Central, explicó Daniel Hurtado, presidente de la CChC durante la presentación del informe Macroeconomía y Construcción (MACh) que da a conocer semestralmente el gremio.
"Es particularmente preocupante lo que está ocurriendo en las áreas de Minería y Energía, que tienen gran incidencia en el desempeño de la construcción. Por una parte, los proyectos de generación eléctrica sufren crecientes dificultades para materializarse y, por otra, esta misma situación –y su negativo impacto en los costos de producción– ha incidido en la postergación de proyectos mineros", agregó.
En este contexto, el dirigente llamó a las autoridades a "trabajar con sentido de urgencia para resolver la grave crisis en materia de energía que vive el país y a no descuidar los incentivos para la inversión y el ahorro, velando porque la reforma tributaria logre mayores niveles de recaudación también por la vía de promover la actividad y el desarrollo económico".
El menor presupuesto para obras públicas en comparación con 2013 y una actividad de concesiones que todavía no despega –agravada por el retiro de proyectos de hospitales que se construirían bajo esta modalidad de financiamiento–, explicarían el fuerte ajuste a la baja de la inversión en infraestructura pública, la cual disminuyó de 1,2% a -1,4%, precisó.
En lo que respecta a infraestructura productiva privada, se continúa observando una disminución de los proyectos en construcción y un aumento de las iniciativas por ejecutar. Ello hace que se mantenga el riesgo de recalendarización de proyectos de inversión productiva –principalmente vinculados a los sectores Minería y Energía– que explican cerca del 70% el gasto en construcción de empresas públicas y privadas. La tasa de crecimiento de la inversión productiva estimada para 2014 fue revisada a la baja hasta bordear 3,1% anual.
Así, la estimación de crecimiento del subsector Infraestructura para este año se ubica en 1,8% anual, coherente con los significativos ajustes a la baja de la inversión pública y privada.
VIVIENDA
En materia de inversión en vivienda con subsidio, cabe destacar que este 2014 el presupuesto público es similar al dispuesto el año 2010.
Al 31 de marzo se otorgaron 10.964 subsidios del Programa Regular, equivalentes al 7% de la meta vigente para el año. De ellos, 5.000 correspondieron al programa de arriendos y casi 4.000 al programa DS 49 sin proyecto, ninguno de los cuales genera en la práctica una mayor actividad de construcción. En el mismo período se pagaron 34.206 subsidios, correspondiendo el 60% al Programa de Protección del Patrimonio Familiar, destinado a la reparación de viviendas.
En lo que respecta a las viviendas sin subsidio, el aumento de la tasa de desempleo, el menor crecimiento económico y condiciones más restrictivas de acceso al crédito proyectan un incremento anual de 2% en 2014, lo que se compara negativamente con el 4,5% previsto originalmente para este año. La venta de viviendas nuevas anotaría un avance de 1,2% a nivel nacional y de 0,1% en el Gran Santiago, lo que implicaría la comercialización de 68.900 unidades en todo el país y de 37.200 en el Gran Santiago.
En el consolidado, se espera que la inversión en vivienda total (pública y privada) se reduzca de 1,4% previsto a fines del año pasado a -0,4% en 2014 en comparación de 2013.