La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó hoy un plan de egresos de US$1,1 billones para financiar las operaciones del gobierno y entregar fondos para programas sociales y de refuerzo de la economía.

La medida, que deberá ser sometida a votación por el Senado antes del 18 de diciembre, fue aprobada por 221 votos a favor y 202 en contra.

El plan combina la asignación de US$447.000 millones para presupuestos de operación y otros US$650.000 millones para financiar, entre otros, programas como Medicaid y Medicare, que son seguros médicos para los indigentes y los retirados.

También financiará planes prioritarios del Gobierno del presidente Barack Obamna, como la construcción de un sistema ferroviario de alta velocidad y el aumento de la supervisión sobre los mercados financieros.

Asimismo, busca aumentar los programas de crédito para las pequeñas empresas, cuya mayor actividad, según el Ejecutivo, ayudará a reducir la tasa de desempleo, actualmente del 10 por ciento.

El presupuesto de egresos, que fue rechazado por la minoría republicana en la cámara baja, también incluye US$3.900 millones para pequeños proyectos en distritos favorecidos por algunos legisladores.

"No hay duda de que ha regresado a Washington la era del gran Gobierno", criticó el legislador Jerry Lewis, el republicano de más alto rango en el Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes.

Sin embargo, los demócratas señalaron que el aumento de fondos ayudará a revertir lo que calificaron como la atrofia registrada durante el pasado Ejecutivo del presidente George W. Bush (20012009).

"Estamos tratando de superar años de abandono y de resolver una emergencia económica", dijo el presidente de ese comité, el demócrata David Obey.

Fuentes legislativas indicaron que esos fondos deberán durar hasta el fin del año fiscal 2010, el 31 de septiembre del próximo año.