El consejo de ministros para la sustentabilidad aprobó en su última sesión el nuevo Plan de Adaptación al Cambio Climático en Biodiversidad, el segundo en su tipo del país -tras el plan en materia silvoagropecuaria de 2013- y el primero aprobado por esta instancia.

"El nuevo Plan de Adaptación al Cambio Climático en Biodiversidad propone 50 medidas que se enmarcan en los cuatro objetivos específicos del plan, que se orientan a los tópicos principales: investigación, creación de capacidades, reducción de vulnerabilidad y protección y conservación de la biodiversidad", indicó el ministro del Medioambiente, Pablo Badenier.

El objetivo de esta estrategia es fortalecer las capacidades del país para proteger su biodiversidad biológica, implementando medidas sinérgicas entre conservación de la biodiversidad y su adaptación al cambio climático, a fin de aminorar las consecuencias negativas del impacto climático. Esto considerando que la biodiversidad chilena es especialmente vulnerable al cambio climático.

Estudios nacionales señalan que el cambio climático genera un estrés bioclimático que excede los rangos de tolerancia biológica de especies y ecosistemas más vulnerables, afectando su presencia y distribución geográfica, así como los servicios ecosistémicos que ellos brindan.

De hecho, la gran mayoría de las 1.447 especies de flora terrestres y 67 especies de fauna analizadas presentarían reducciones en su área de distribución proyectada bajo futuros escenarios climáticos, incluyendo -en algunos casos- el peligro de extinción.

En la ocasión, el titular de la cartera indicó que "es posible incrementar la capacidad de adaptación de especies y ecosistemas al cambio climático, pero ello requiere de un combinación de esfuerzos tanto en materia de conservación como en la restauración y la gestión sostenible".

PLAN DE ADAPTACION

Las medidas que se describen en forma de "fichas de acción" constituyen un marco orientador para la futura implementación de la acción.

De ellas, un 22% corresponden a medidas de Planificación y Manejo Sustentable, un 19% a Medidas in situ y ex situ de Protección y Conservación, un 18% al Desarrollo de Capacidades, educación y sensibilización; 15% a Protección de hábitats y restauración de hábitats degradados, 9% a Investigación, 8% a Monitoreo, 6% a Manejo Sustentable de Recursos Naturales Vivos y 3% a Protección contra Especies Invasoras.

En materia de biodiversidad del país, esta iniciativa se suma al proyecto de ley que crea el Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas, actualmente en trámite en el Congreso.