Cambio de época: ¿Se debe pasar de Holoceno a Antropoceno?

Hace pocos días un grupo de expertos se reunió en Berlín para sentar las bases de una discusión para ser analizada en el próximo Congreso Internacional de Geología, en 2016.

La pregunta que mantuvo a este grupo encerrados por horas es relativamente sencilla: ¿Llegó la hora de terminar la época actual, conocida como Holoceno (iniciada hace 11.700 años), y comenzar a llamar al período en que vivimos, definido por la impronta del hombre sobre el planeta, con un nombre nuevo?

La pregunta es sencilla, pero la respuesta tiene más de una arista. Lo único en lo que parecen estar de acuerdo los expertos es el nombre: Antropoceno (del griego "anthropos", por humano, y "cene", que significa nuevo).

Muchos creen necesario que el nombre de la época en que vivimos refleje que la Tierra está cambiando aceleradamente por la actividad humana.

Otros creen que, además de ajustar el discurso científico a la realidad, la demarcación de una nueva época podría tener consecuencias a nivel práctico, incluso legal (de ahí la presencia de un abogado entre los expertos). "La ley internacional de los mares fue moldeada sobre los cambios de las instituciones humanas, con una geografía de la tierra y el mar estable como base", explica Jan Zalasiewicz, director del grupo de trabajo de la Comisión Internacional de Estratigrafía, encargado de elaborar las recomendaciones. "Si el Antropoceno se convierte en una unidad formal marcará una diferencia en cuanto a los acuerdos legales. Esto implicaría cambios en las leyes que protegen a las comunidades costeras, por ejemplo", dice.

La palabra Antropoceno, o mejor dicho, el concepto, fue lanzado al ruedo por primera vez por el holandés y Nobel de Química Paul Crutzen en el año 2000. Su punto era que el nombre de la época geológica actual debería reflejar el impacto del hombre sobre la Tierra.

¿Cuándo se inició esta época? Zalasiewicz sugiere que con la Revolución Industrial, a mediados del siglo XVIII. El problema es que esta revolución comenzó en momentos y en lugares diferentes. "Y cuando buscamos un signo para demarcar un intervalo en el tiempo necesitamos que sea algo que afecte a la Tierra más o menos al mismo", explica.

Otra posibilidad, tomando en cuenta esto, es definir el inicio del Antropoceno por la aparición de los radioisótopos -isótopos radiactivos-, producto de las bombas atómicas de los años 40 y 50.

O, según Philip Gibbard, profesor de la U. de Cambridge (Reino Unido), e integrante del grupo de discusión, algunos sugieren que se puede establecer como línea divisoria el inicio de la agricultura.

"La limpieza de terrenos para la agricultura y el inicio de la domesticación de animales, hace aproximadamente unos diez mil años, dejaron una marca en los sistemas naturales", explica.

Como sea, la discusión recién comienza.