Fumar un cigarro en una plaza donde existan juegos para niños o manejar con un 'pucho' en la mano quedarán prohibidos, de aprobarse el proyecto que modifica y endurece la actual Ley del Tabaco, que rige desde marzo de 2013 en el país.
Se trata de una iniciativa que ya fue aprobada por la Comisión de Salud del Senado y que busca adecuar la actual normativa al Convenio Marco de la Organización Mundial de la Salud (OMS), suscrito por Chile.
Entre los cambios más profundos que propone el texto, está el de prohibir "fumar en las áreas silvestres protegidas del Estado y en parques, plazas y lugares de recreación destinados a menores",
En estos casos -y tal como ocurrió el año pasado con los estadios deportivos- los administradores de cada recinto recreativo deberá habilitar solo un área para los fumadores, convirtiendo así en espacios libres de humo el resto del sitio.
También, la norma introduce un cambio a la Ley de Tránsito y dispone la imposibilidad de consumir tabaco al interior de los vehículos. "Se prohíbe al conductor fumar mientras conduce. Asimismo, se prohíbe fumar en todo vehículo que traslade a menores de edad", señala el articulado.
Además, el proyecto suma un nuevo artículo donde "se prohíbe el ingreso de menores de edad a lugares habilitados para fumadores", lo que, según explicó el senador Guido Girardi (PPD), busca evitar que los menores se inicien en el consumo del cigarrillo. "Los niños se mueven en estos espacios, al aire libre, lo ecológico y los juegos y las tabacaleras les interesa que se las asocie con medioambiente, naturaleza y juego", sostuvo.
El articulado también declara ilegal la "venta de cigarros a menores de 18. Hoy esto ocurre, pero solo hay multas. Ahora habrá sanción penal y además se arriesga el cierre del local".
Las cajetillas de cigarros, de prosperar la iniciativa, sufrirán cambios. Esto, pues se crea una "cajetilla universal" que será igual para todas las marcas evitando que se haga promoción en el envasado y se elevará , además, el espacio destinado en ellas para la información de riesgos del tabaco.
"La advertencia deberá cubrir el 100% de las dos caras principales de los paquetes de cigarrillos o cigarros, bolsas o paquetes de productos de tabaco", dice el texto.
Uno de los puntos que generó discusión en el proyecto es el que establece la responsabilidad objetiva de las tabacaleras, por los problemas a la salud asociados al consumo del tabaco. Es decir, que la industria debería responder por las enfermedades que afecten a los fumadores.
"Son materias que van a enredar la tramitación del proyecto por tener vicios constitucionales", dijo el senador Francisco Chahuán quien, pese a ello, calificó como "razonables" el resto de las modificaciones porque "buscan disminuir el consumo del tabaco en el país, sobre todo en menores. Hay un costo en vidas humanas y el Estado se hace cargo de patologías derivadas del consumo desembolsando unos US$ 3 mil millones anuales", dijo.
Según cifras del Ministerio de Salud, cada día mueren 46 personas por efecto del tabaco y, por año, el país gasta casi 2.500 millones de dólares en tratar a pacientes que sufren enfermedades asociadas al consumo de cigarrillos.