"No podía salir, era prisionera, es realmente una sensación horrible: no se lo deseo ni a mi peor enemigo", aseguró a fines de mayo, Camilla, la duquesa de Cornualles, al diario británico Daily Mail.
La esposa del príncipe Carlos de Inglaterra habló entonces y por primera vez de lo que consideró "el peor período" de su vida: su etapa como amante del heredero al trono británico, cuando éste aún estaba casado con Diana de Gales.
"La hostilidad del público contra mí era tal que no me atrevía a salir de casa. Mis hijos contaban los fotógrafos que se escondían detrás de los arbustos. Miraban con los binoculares desde mi habitación o desde el cuarto de baño dónde estaban los fotógrafos escondidos. Algunos días contaban hasta seis", detalló al periódico.
Este lunes, la duquesa de Cornualles cumplió 70 años en medio de un escenario completamente distinto al que se encontraba cuando el alcance de su relación con Carlos se destapó en 1992. La hoy ya Camilla Windsor goza de una aceptación entre los británicos que la propia duquesa -protegida por la Casa Real-ha ido cultivando con el tiempo.
Carlos y Camilla se conocieron en 1970 en un partido de polo en Windsor. "¿Sabía usted, señor, que su tatarabuelo y mi bisabuela fueron amantes?", le dijo Camilla y desde ese entonces comenzaron una relación intermitente, incluso cuando el heredero ya se había casado en 1981 con Diana Spencer.
Pero la llamada "boda del siglo" terminó en separación en 1992 y Camilla fue apuntada como la gran causante del quiebre de la pareja real. "En mi matrimonio éramos tres y era un poco multitudinario", dijo Diana en su emblemática entrevista a la cadena BBC en 1995.
En 1996 Diana y Carlos se divorciaron, un año antes de la muerte de la princesa. Fue uno de los momentos más bajos de la monarquía británica. También de la imagen pública de Camilla, enfrascada en un escándalo que ya había alcanzado el ojo público en 1992 con la publicación del contenido de unas cintas, grabadas en secreto en 1989, donde la pareja mantenía una conversación telefónica de alto contenido erótico.
Como sea Camilla se casó con Carlos en 2005, y tras 12 años de matrimonio, la duquesa se ha ganado la aceptación entre los británicos y se ha convertido en un rostro familiar en las actividades de la realeza. Su presencia es cada vez más habitual en los actos oficiales. Según el diario español El País, solo el año pasado asistió a un total de 221 compromisos reales.
La pareja también cuenta con un respaldo creciente entre el público británico. El príncipe Carlos y Camilla tienen una aprobación del 60% según una encuesta de Ipsos Mori. De todas formas, ese porcentaje es menor a la popularidad de la Reina, cuya tasa de aprobación supera el 80%.
Pero según los pronósticos, la aceptación de Camilla podría crecer. De acuerdo a una encuesta de YouGov, el 49% de los británicos piensa que, en caso de que Carlos ascienda al trono, Camilla debería tener el título de reina consorte. El 35% asegura que debería tener un título menor por respeto a Diana. El 16% se muestra indeciso. Cuando la pareja se casó, solo el 7% de los encuestados por YouGov pensaba que Camilla debería un día ostentar el título de reina.
Con motivo de su 70° cumpleaños, la residencia oficial de Carlos y Camilla, Clarence House, divulgó dos imágenes oficiales tomadas por el fotógrafo peruano Mario Testino, el favorito de Diana.
Testino declaró que fue "un verdadero honor" retratar al heredero y la duquesa. Además de ser un renombrado artista mundial, el peruano era considerado como un amigo íntimo de la fallecida princesa. Fue el elegido además del príncipe Guillermo para inmortalizar su compromiso con Kate Middleton en 2010 y, recientemente, el bautizo de su hija Carlota.