La batalla ya estaba declarada. Desde que en 2009 se presentó en el Congreso el proyecto de ley que fija en un 20% la emisión de música chilena en radios, las opiniones desde ambos bandos levantaron polvareda. Eso sí, a partir de este año el debate encontró una mayor caja de resonancia. Desde la semana pasada, la Asociación de Radiodifusores de Chile (Archi) ha utilizado las señales que integran el organismo para difundir, con una frecuencia promedio de media hora, una fuerte campaña que cuestiona la iniciativa.
Se trata de un aviso de casi 30 segundos en que, a partir de una escena cotidiana, se empalma con la frase "la música chilena debe fomentarse y difundirse, no imponerse". Además, se trata de una arremetida impulsada luego que el 22 de enero la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología del Senado rechazara la idea de legislar el proyecto, proceso que culminará en marzo, cuando sea votado por el pleno de la Cámara.
"La idea es informar que este es un proyecto mal hecho. Primero, obliga a alterar la programación de muchas radios, incluidas las que sólo tocan música anglo; luego, cambia los hábitos de escucha de los auditores; y afecta la competitividad de las emisoras versus otros formatos. Vamos a seguir renovando esta campaña con nuevas piezas y con un mensaje más fuerte", dice Luis Pardo, presidente de Archi.
Alejandro Guarello, presidente de la SCD, la asociación que ha promovido la obligatoriedad de sonidos locales en el dial, responde: "Esta campaña carece de fundamento real. Aunque la Archi es libre de presentar su opinión, sólo podríamos objetar el espacio del que hace uso al emitir su campaña, y al que no tiene acceso ni nuestros músicos ni nosotros como sociedad. Es por eso que la 'pelea' está en conseguir y asegurar un espacio de difusión justo para nuestra cultura".
Otros protagonistas, los músicos, también critican la propaganda de Archi. Italo Vásquez, uno de Los Vásquez, uno de los grupos locales que más han sonado en el dial en los últimos tres años, dice: "No estoy de acuerdo con que la Archi diga que se coarta la libertad de las emisoras. En Chile hay tal variedad de música que no afectaría la parrilla de las radios".
Rodrigo "Don Rorro" Osorio, de Sinergia, acota: "Habría que preguntarle a la Archi por qué no apoya algo que nos pertenece. Las radios nos pertenecen, son del Estado. Habría una revolución cultural en Chile si se subiera a 20%".