Miles de personas fueron evacuadas de sus casas en las últimas horas en la Columbia Británica ante la proliferación de incendios forestales que padece la provincia y que ya han quemado 550 kilómetros cuadrados de bosque.

Las últimas cifras señalan que las autoridades de la provincia canadiense, situada en la costa del Pacífico, están siguiendo la evolución de 739 incendios forestales y temen que la cifra seguirá aumentando mientras se mantengan las altas temperaturas y el clima seco que domina la región desde hace semanas.

Una portavoz del Ministerio de Bosques de la provincia declaró al periódico "National Post" que "la cifra está ascendiendo de forma rápida. Podríamos ver más (incendios) empezar en los próximos dos días con el pronóstico de elevadas temperaturas".

Las temperaturas récord que está sufriendo la provincia han provocado que el 85 por ciento de la superficie de Columbia Británica esté bajo el riesgo elevado o extremo de incendio, advirtió el primer ministro provincial, Gordon Campbell.

Las autoridades también señalaron que alrededor del 90 por ciento de los 2.100 incendios que la provincia ha sufrido desde abril han sido causados por rayos.

El origen del 10 por ciento restante es humano. En total, estos incendios han quemado una superficie boscosa equivalente a 550 kilómetros cuadrados.

En las últimas horas, las autoridades han ordenado la evacuación de 2.300 personas de la localidad de Lillooet, en el centro de Columbia Británica, ante el avance sin control de un incendio que ya ha consumido 2.650 hectáreas en los alrededores del monte McLean.

Otras 2.500 personas del lago Okanagan llevan ya tres días fuera de sus hogares ante la rápida expansión de un incendio en la montaña Terrace.

Miles de bomberos, incluidos más de 800 llegados de otras provincias canadienses, están combatiendo las llamas a pie y desde helicópteros y aviones cisterna.