Para evitar que se produzcan complicaciones, polémicas y situaciones de "ruido mediático" como las ocurridas con algunos participantes de 1810, Canal 13 endureció el trato con los concursantes de 1910, la segunda parte de ese reality de época, que debutó el lunes.
Importantes fuentes de la estación confirman que esta vez en la negociación de los contratos con cada una de las figuras -desde Vivi Rodríguez a Alvaro Ballero- se utilizó un tono más drástico en cuanto al cumplimento de las cláusulas del acuerdo. Estos puntos incluyen desde el sueldo que recibirán, hasta los compromisos para asistir a eventos y dar entrevistas relacionadas con el reality.
"Lo que sucede es que hasta el momento, cuando se han dado situaciones anómalas de concursantes que van en contra de sus contratos, se minimizaron las medidas y se evitó llegar a decisiones como que el canal los demandara por incumplimiento del acuerdo. Sin embargo, ahora seremos más estrictos", añaden los mismos personeros.
En la estación televisiva ejemplifican con el caso de Flavio Caqueo, el participante de Amor ciego (2008) que pidió retirarse porque extrañaba a su novia y quería volver a estar con ella. Luego Caqueo apareció en Primer plano, faltando a su contrato que estipulaba que no podía aparecer durante un mes en otros medios o programas luego de desertar del show de citas. Personeros de la red indican que en esa época no demandaron al participante, pero si ahora ocurriera algo parecido llevarían a cabo la mayor sanción establecida.
En la red universitaria están conscientes de que algunas de las críticas públicas de los participantes de 1810 -como los reclamos de Angélica Sepúlveda porque no la dejaban asistir a programas de otros canales, o las quejas de Juan Pablo Alvarez, por no poder estar en un concurso de otro canal- se produjeron debido al desfase de dos meses entre el fin de las grabaciones y la realización de la final, que los protagonistas no tenían contemplado. Por eso, en las tratativas con los personajes de 1910 lo primero que se les aseguró es que esta vez "no habrá un desfase mayor a 72 horas entre las grabaciones y la emisión en pantalla", como cuentan otras fuentes de la señal televisiva que prefieren mantener su nombre en reserva. Con esto manifestaron a los concursantes que no habrá espacio para que se den los problemas por los que protestaron los finalistas de 1810.
Entre los puntos más remarcados por UC-TV a los participantes del nuevo reality es que se les pagará el sueldo semanal proporcional acordado con cada uno, excluyendo la posibilidad de una renegociación que esté fuera de las opciones del contrato. También se les dejó claro la cantidad de eventos o entrevistas sobre el show que tendrán que cumplir.