La jefa de gobierno, Angela Merkel, aseguró que su país está dispuesto a "seguir haciendo lo que sea necesario" para "garantizar un euro estable"

En una entrevista a la revista germana "Stern", la jefa del Gobierno de centro-derecha alemán descartó además, de forma categórica, una posible vuelta al marco o una Europa de dos velocidades.

"No hay vuelta atrás al marco alemán", afirma, para añadir, respecto a la posibilidad de una Europa a dos velocidades, con un "conmigo no, claramente no".

A pesar de que la economía alemana creció el año pasado un 3,6% y que el Ejecutivo prevé para 2011 un avance del 2,3%, Merkel considera que aún algunas amenazas se ciernen sobre la locomotora de Europa.

En concreto, la canciller destaca el problema de algunos tipos de interés a nivel europeo demasiado bajos que alientan la inflación en la Eurozona y, a la vez, la especulación con dinero barato.

Merkel reconoce que la rebaja de los tipos "ha ayudado a salir de la crisis", pero señaló que en la actualidad la cuestión es que "cuanto menores sean los tipos, mayor será la especulación".

En este sentido, la canciller subraya nuevamente  la unidad del eje franco-alemán al apoyar la iniciativa del presidente galo, Nicolas Sarkozy, que aprovechando su presidencia del G-20 ha abogado por luchar contra la especulación en los mercados de materias primas.

Para que el conjunto de la zona del euro abandone la crisis, Merkel apuesta por ahondar la coordinación "de las políticas fiscal y social".

"Debemos coordinarnos, no trabajar de forma paralela, para eliminar nuestras discrepancias. Cuanta mayor sea nuestra unidad, mejor", señala.

Además, Merkel aboga por no ceñir la colaboración económica y fiscal a los países que comparten el euro, sino ampliarla a toda la Unión Europea, aunque, remarcó, "el más lento no debe ser el que marque los tiempos".