Una segunda reunión para abordar la estrategia de Chile frente a la fase oral del juicio con Perú ante el Tribunal de La Haya, sostuvo el gobierno con representantes del Congreso.
En esta ocasión, el Presidente Sebastián Piñera, junto al canciller Alfredo Moreno, recibieron a los parlamentarios de las comisiones de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados y el Senado, junto a los presidentes de ambas corporaciones, Nicolás Monckeberg y Camilo Escalona, respectivamente.
Tras finalizar el encuentro, el ministro de RR.EE agradeció la presencia de los parlamentarios y calificó la reunión de "fructífera".
"Hemos tenido un intercambio de opiniones positivo, y creo que nuevamente se ha rescatado lo que a mí me parece que es lo esencial, que es la unidad, la continuidad en estas materias. Los planteamientos de Chile son uno solo, y la gran fortaleza de Chile -como lo dije ayer- está precisamente en su unidad", aseveró el secretario de Estado en alusión a la cita que sostuvo ayer el gobierno con representantes de los partidos políticos.
A nombre del Congreso, el presidente del Senado, Camilo Escalona, agradeció la invitación del Presidente Piñera y planteó que "hemos tenido un amplio intercambio de opiniones, y compartimos la base sobre la cual la conducta internacional de Chile se ha orientado en el curso de las últimas décadas".
"En esta situación y en otras en que nuestro país se ha distinguido por la misma actitud: Chile está unido en torno al respecto del derecho. Esa es la base de nuestra posición, estamos convencidos que nos entrega una fortaleza y la razón en torno a la resolución que pueda tomar el tribunal de la Haya y será la base inconmovible sobre la cual los actores políticos e institucionales del país mantendrán la orientación en el futuro", dijo el presidente del Senado.
Escalona, enfatizó que para estos temas, "nuestra conducta es una sola: El respeto y la salvaguarda del derecho internacional".
En la reunión de ayer, Piñera y los presidentes de partidos acordaron no politizar el fallo de La Haya. La inquietud es motivada porque el resultado del litigio se dará a conocer a mediados de 2013, en plena campaña presidencial.