Los cancilleres de los países de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) reafirmaron hoy, en su III Reunión Extraordinaria en Quito, que no reconocerán "ninguna convocatoria a elecciones de parte del gobierno de facto" en Honduras.
Ese Gobierno se conformó después de que el pasado 28 de junio, Manuel Zelaya, Presidente elegido democráticamente, fuese depuesto y obligado a salir del país.
Los ministros de Relaciones Exteriores de la Unasur convocaron a la comunidad internacional a "extremar los recursos necesarios y a adoptar nuevas medidas para asegurar el restablecimiento de Zelaya en el ejercicio pleno de sus funciones", informó la Cancillería de Ecuador en un comunicado.
Adicionalmente, los ministros pidieron "la restauración pacífica de la democracia" en el país centroamericano "en el marco de la reconciliación nacional y de la paz, con irrestricta solidaridad con el pueblo hondureño".
Los cancilleres anunciaron también que respaldarán la misión del secretario general Jose Miguel Insulza, y de los cancilleres de la Organización de Estados Americanos.
De ese modo, los cancilleres ratifican "su compromiso con la democracia como único sistema para resolver los desafíos y brindar mayores esperanzas y oportunidades".