El gobierno, a través de la Cancillería, se sumó hoy a los llamados de la comunidad internacional para buscar una solución a la crítica situación que se vive en Libia, pidiendo que el coronel y líder de ese país, Muammar Gaddafi, abandone el poder.
De esa forma -sostiene el Ministerio de Relaciones Exteriores en un comunicado de prensa-, se podría facilitar una "transición pacífica hacia un régimen democrático, en un marco de pleno respeto a los derechos humanos y libertades fundamentales por parte de todos los actores involucrados en la reconstrucción y reconciliación del país".
"El gobierno de Chile ha seguido con particular interés el desarrollo de los acontecimientos políticos en Libia, y ha contribuido activamente a la labor de la comunidad internacional en defensa de los principios democráticos y el respeto de los derechos humanos, gravemente conculcados por el régimen del coronel Gaddafi", se agrega.
En el día de hoy, ante la búsqueda de los grupos opositores al régimen del paradero del líder libio, los rebeldes ofrecieron 1,6 millón de dólares para quien capture o mate a Gaddafi, agravando aún más la situación en ese país.
Por otra parte, la Cancillería chilena también pidió al gobierno de Siria deponer la violencia en contra de los manifestantes en ese país.