"Yo creo que se puede ganar la Presidencia, pero ya creo que todos tenemos que dedicarnos a trabajar más en ese sentido, a proponer ideas y a discutir menos por los medios de comunicación".

De esta manera, el senador Guido Girardi (PPD) se refirió ayer a la fuerte tensión que existe entre el eje progresista de la Nueva Mayoría y el candidato presidencial Alejandro Guillier por el rumbo de la campaña.

Si bien Girardi pidió, con esas palabras, contener el debate público, ha sido él mismo el que ha lanzado, en los últimos días, cuestionamientos, como cuando pidió "profesionalizar" el equipo que rodea al abanderado.

Así, sus dichos de ayer no provocaron efecto. De hecho, durante la jornada se generaron nuevas críticas cruzadas, en las que participó el propio Guillier, al apuntar con dureza a la estructura partidaria que algunos dirigentes del oficialismo han defendido y que han intentado imponerle al candidato. Esto, por ejemplo, a través de la solicitud de nombrar a un "generalísimo".

En la mañana, el diputado y ex timonel socialista Osvaldo Andrade se sumó a las críticas. En una entrevista a Emol, el parlamentario dijo que "lo que necesito es que Guillier se transforme en candidato, que irrumpa, que se termine esta tontera de que ´ay, se reúne el comité estratégico', que el comando, que no sé quién, que las peleas entre ellos: son pendejerías". Y agregó: "Esto es un trencito. Algunos se bajan, otros se caen, hay algunos que se agolpan, pero que ande el trencito. Mientras esté parado, no resulta".

En este contexto, el propio candidato presidencial salió a enfrentar no sólo las declaraciones de Andrade, sino que las continuas críticas de dirigentes oficialistas a la estructura del comando y al desarrollo de la campaña. Durante una actividad en Linares, Guillier dijo que "estamos juntando las firmas, y en un sólo fin de semana juntamos 14 mil, lo que demuestra que el tren que arrastra a algunos son los que siguen mirando la política como en el siglo XX, amparados en partidos jerárquicos, autoritarios, oscuros y poco transparentes".

El senador reiteró que "lo que nosotros estamos ofreciendo es un gobierno ciudadano, donde los políticos dialogan con la ciudadanía", junto con señalar que "los grandes cambios que el país está enfrentando fueron impulsados primero por la sociedad civil". Así, recalcó que "habrá algunos que se quedarán en el siglo XX, problema de ellos".

La dura e inédita crítica a la estructura partidaria que algunos defienden -antes Guillier sólo había apuntado a una mayor "horizontalidad" en las colectividades- se suma a otros enfrentamientos con la Nueva Mayoría, que surgieron en el interés de los dirigentes por influir en su programa de gobierno y en la conformación de sus equipos, algo que el senador ha buscado contener.

Hace algunos días, por ejemplo, defendió su estilo ciudadano, advirtiéndole a los partidos que, si no están conformes, que "busquen un (candidato) militante". Y anteriormente había enfatizado que él escogería a "personas que me den confianza" para integrar al comando.