El nacionalista Ollanta Humala aceptó hoy el reto del ex Presidente Alejandro Toledo para hacer un debate entre los candidatos "grandes" para las elecciones presidenciales peruanas del 10 de abril.
"A mí me parece que está bien, es buena la idea", afirmó Humala.
En principio, el centrista Toledo y Humala, primero y cuarto respectivamente en las encuestas, negociaban un debate entre los dos, pero el ex mandatario sugirió ampliarlo al centroderechista Luis Castañeda y la derechista Keiko Fujimori, que se disputan el segundo puesto.
En las negociaciones podría ser incluido el liberal Pedro Pablo Kuczynski, el único otro entre los 11 candidatos que pasa de lejos en las encuestas del uno por ciento.
La posibilidad de un debate alterno al oficial que hará el domingo el Jurado Nacional de Elecciones ha tomado fuerza ante la creencia de que una presentación con 11 candidatos no es óptima.
Un primer encuentro entre los 11 postulantes, realizado el jueves pasado por el diario "El Comercio", tuvo que limitarse a sucesivas exposiciones, pues el número de oradores impedía el debate propiamente tal
"Todos suben al ring de box pero nadie se toca. Unos hacen calistenia, otros le pegan a la pera, no hay confrontación de ideas. Ese formato no beneficia al espectador", comentó Humala.
En el primer debate, según los analistas, se robaron el show candidatos con minúscula intención de voto, como José Nique, Juliana Reymer, Ricardo Noriega y Humberto Pinazo, pero no por la fortaleza de sus ideas sino por lo pintoresco en sus argumentos y estilos.
Delegados de Toledo y Humala ya tenían previsto reunirse para preparar el debate, pero ahora se espera que se les sumen similares de Fujimori, Castañeda y Kuczynski. De momento no hay siquiera fecha, escenario ni formato opcionales.