Pasajeros molestos protestaron en el aeropuerto de Domodedovo en Moscú, luego de que lluvias heladas y cortes de electricidad interrumpieran los vuelos por segundo día consecutivo.
Un gran número de personas, muchas de ellas varadas desde hacía más de 24 horas, irrumpieron en la zona de control de pasaportes, exigiendo información sobre sus vuelos, dijo la agencia de noticias Interfax.
Pese a las optimistas declaraciones de la compañía de electricidad de la capital rusa y de las autoridades del aeropuerto, "el servicio eléctrico sigue mayormente interrumpido, con las cintas transportadoras de equipaje y las escaleras mecánicas paralizadas", agregó la agencia.
Alrededor de 200 vuelos fueron cancelados el lunes luego de que una lluvia helada derribara cables de luz y cortara la electricidad de Domodedovo el domingo. En tanto, la falta de líquido descongelante impidió el despegue de los aviones en Sheremetyevo, otro aeropuerto importante de Moscú.
Las temperaturas bajo cero y la nieve son habituales en los meses de invierno en la capital rusa, pero el fin de semana se registraron inusuales precipitaciones de una extraña lluvia helada, que puede formar una gruesa capa de hielo en los cables de luz, que terminan cayendo por su propio peso.
Las autoridades del aeropuerto dijeron que la normalización total del tráfico aéreo llevará dos días más.
Domodedovo, el mayor de los tres aeropuertos de Moscú, fue utilizado por 19 millones de pasajeros el año pasado, mientras que casi 15 millones pasaron por Sheremetyevo.