Venden golosinas, parches curitas y hasta paraguas dentro de los carros del Metro. Y en las estaciones con mayor flujo de pasajeros se ofrecen cargadores de teléfonos, lentes y productos de belleza. Incluso, "dobladitas con queso". Se trata de los comerciantes ambulantes, cuya presencia ha experimentado un fuerte crecimiento en la red del tren subterráneo este año.
Según el último registro entregado por la 60a Comisaría de Carabineros, se cursaron 2.473 multas a vendedores ilegales durante el primer semestre de 2017.
De hecho, quienes ejercen este oficio se distribuyen el "mercado" de los vagones del tren subterráneo: viajan en convoyes diferentes para no toparse y ofrecer diferentes productos. Además, en el piso de las estaciones disponen sus productos durante las horas de mayor circulación de personas, sin que sean interrumpidos.
En la estatal se explica que para enfrentar esta actividad se aplica un plan que contempla el refuerzo de la dotación de vigilantes y el trabajo con Carabineros.
¿Qué acciones concretas se toman en la firma? El personal de seguridad es el encargado de realizar el contacto con los vendedores ambulantes, a los que se les pide que se retiren de la estación. Se añade que, de ser necesario, se solicita el apoyo de Carabineros, los que tiene la facultad de cursar boletas de citación y de requisar la mercadería. Los infractores quedan citados a los juzgados de policía local. También se realiza una campaña a través de las redes sociales para que los usuarios "no incentiven el comercio ambulante mediante la compra de productos dentro de los vagones y recintos". La empresa tiene un circuito cerrado de televisión (con 1.600 cámaras), 600 vigilantes de uniforme y otros 300 guardias de seguridad.
Louis de Grange, director de la Escuela de Ingeniería Industrial de la UDP, sostiene que la estatal ha realizado "esfuerzos en esa línea, pero el tema es muy difícil". Esto, pues dice que el comercio de este tipo ha aumentado por "el deterioro del empleo formal y al aumento de inmigrantes que no encuentran mejores oportunidades".
De acuerdo con las estimaciones del Instituto Nacional de Estadísticas, alrededor de un 30% de las personas "ocupadas" en el país posee un trabajo considerado como informal, entre los que se cuenta la venta de artículos en espacios públicos.
Para Franco Basso, investigador del Observatorio para la Movilidad Urbana Sustentable, este comercio ha mostrado un crecimiento durante los últimos años, particularmente, después del inicio del Transantiago. "Metro no ha sido lo suficientemente enérgico para combatirlo. Considerando la gran cantidad de personal de terreno que tiene en las estaciones, es absolutamente factible disminuir el impacto de esta actividad con los recursos existentes", dice.
Músicos
El reporte oficial de Carabineros también consigna que bajo el denominado "Decreto Metro" (el que detalla una serie de prohibiciones en la red) se registraron 1.626 sanciones, entre las que se cuentan las cursadas a aquellas personas que se desempeñan como músicos.
También, dentro de quienes han sido multados por esta norma se cuentan los que realizan actividades como la mendicidad, conductas indecorosas y no respetar las normas de transporte.
Con los artistas callejeros sucede lo mismo que con los ambulantes, pues los grupo viajan en convoyes diferentes, donde se ofrecen diversos tipos de música.
La estadística, además, contabiliza 273 detenciones debido al consumo de alcohol en el tren subterráneo.