Cardiff FC, la nueva casa futbolística de Gary Medel a la que llegará a cambio de 20 millones de dólares, es un legendario club de origen galés, que participará este año en la Premier League de Inglaterra y que tiene más de alguna curiosidad.

Fundado el 1 de enero 1899, desde esa fecha registra 15 temporadas en Primera División, en donde tuvo su mejor campaña con un subcampeonato en 1924. 

Pero fue tres años más tarde, en 1927, donde alcanzó su mayor logro al ganar la FA Cup, siendo el primer cuadro de su país en titularse en Gran Bretaña, logro que después sumó el Swansea, su archirrival, en 2013.

A nivel internacional, el cuadro galés lograría su mejor rendimiento curiosamente en la Recopa de Europa de la temporada 1967/68, donde alcanzaría las semifinales del torneo. En éste, dejaría atrás a elencos como el Shamrock Rovers irlandés, el NAC holandés y el Torpedo Moskva, cayendo en su intento de llegar a la definición ante el Hamburgo holandés.

Sin embargo, no todo sería alegrías, ya que en el plano local los ochenta serían nefastos para el nuevo equipo de Gary Medel. En efecto, tras descender de la primera división de Inglaterra en 1962, en un plazo de cuatro años entre 1984 y 1988 bajarían hasta la Fourth Division.

En 2010, y con el elenco en la llamada segunda división inglesa, el empresario malasio Chan Tien Ghee se haría con el control de la institución, transformándose en su presidente y con el retorno a la primera categoría como principal objetivo.

Así, y tras tres años, solo esta temporada se dio el retorno a la Premier League, tras ser campeón de la Football League Championship con 87 puntos (75 goles a favor), superando por ocho al Hull City.

En cuanto al primer equipo, su técnico desde junio de 2011 es el escocés Malky Mackay -quien estuvo en Old Trafford viendo a Gary Medel en el Manchester United-Sevilla, mientras que su principal figura en un plantel que no contaba con sudamericanos es el galés y ex Liverpool Craig Bellamy, de 34 años, junto a otros seleccionados de sus países como el coreano Kim Bo-Kyung y el islandés Aron Gunnarsson.