Carles Puigdemont, el presidente de la Generalitat, quiso dedicarse a la política después de asistir a su primer mitin, donde se encontraba nada menos que Jordi Pujol, considerado uno de los principales líderes del nacionalismo catalán. Según relata el diario La Opinión de Murcia, fue en esa concentración que "le entró con fuerza el gusano de la política". Al poco tiempo ingresó a las Juventud Nacionalista de Cataluña, estudió Filología Catalana y tras su egreso comenzó su carrera en periodismo, que lo llevó a crear la Agencia Catalana de Noticias (ACN) y a la dirección del diario en inglés Catalonia Today. Ahora, podría pasar a la historia como el líder que llevó a esta región del norte de España a su independencia.
Esto porque el 1 de octubre se llevará a cabo un referendo -que Madrid califica de ilegal- en el que los catalanes responderán si quieren que Cataluña sea un Estado independiente. "Después del 1 de octubre las cosas van a cambiar sea cual sea el resultado y si el resultado es favorable a la independencia de Cataluña esto va a dejar de ser un asunto doméstico español, para convertirse en un asunto de interés europeo. Creo, además, que nos habremos ganado el derecho a ser escuchados. Nos habremos ganado el derecho a ser reconocidos, pero como mínimo a ser escuchados", sostiene Puigdemont en un encuentro con cinco periodistas de medios sudamericanos realizado en la sede del gobierno de Cataluña. La Tercera fue invitada por el Consejo de Diplomacia Pública de Cataluña.
Este político de 54 años ingresó a la arena política en 2006 como diputado al Parlament de Catalunya, y seis años más tarde se convirtió en alcalde de Girona. Sin embargo, la posición que ocupa ahora casi sucedió por accidente, luego que fuera llamado a última hora para liderar una particular coalición de partidos separatistas.
Hijo de una familia humilde de pasteleros, está casado y tiene dos hijas. Es aficionado a la guitarra y le gusta cantar Let it Be. De hecho, su melena recuerda el look de los Beatles. Su estilo es más bien relajado y quienes lo conocen dicen que es preocupado por su círculo.
Este encuentro tuvo lugar dos días después de que se realizara una masiva manifestación independentista convocada con motivo de la fiesta de Cataluña, que se celebra cada 11 de septiembre.
Usted ha dicho que está abierto al diálogo con el gobierno español, en caso de que antes del 1 de octubre se produjera un acercamiento ¿Qué ofrecimiento están dispuestos a aceptar? ¿Podrían aceptar otra cosa que no sea el referendo?
Esto no está en mi mano de poder decirlo, porque para poder aceptarlo debería haber algo en la mesa. Cuando yo le formulé la pregunta al Presidente Rajoy sobre cuál era su propuesta, desde hace años que la respuesta a esta demanda siempre ha sido no, nada. Cuando propusimos el estatuto de autonomía, cuando propusimos un pacto fiscal, nos dijeron que no. Cuando propusimos en el marco de la Constitución española la transferencia de la competencia para hacer una consulta no vinculante en Cataluña, nos dijeron que no. Cuando incluso le propusimos una serie de puntos muy prosaicos y muy concretos de incumplimientos del Estado, nos dijeron que no. Entonces, para qué especular. Sabe qué pasa, en los 40 años que nos separan de las primeras elecciones democráticas ha habido un sin fin de propuestas catalanas para España. Jamás ha habido una propuesta española para Cataluña. A lo mejor es el momento, si tienen algo que proponer, creo que deben ser ellos. Nosotros hemos invitado a un diálogo sin condiciones, y que no nos digan que para dialogar tienen que renunciar a lo que es lo que ha votado la gente. Sin embargo, no les exigimos ninguna condición previa para sentarnos a negociar y a escuchar ¿Tienen algo sobre qué hablar? Cuando he hecho esa pregunta la respuesta ha sido nada. Entonces no vale la pena recorrer un camino que ya lo recorrimos el 2005 y 2006.
¿Por qué cree que Rajoy no ha conversado con ustedes sobre el referendo?
Esa pregunta se la realiza mucha gente. ¿Por qué este señor está renunciando a hacer política? ¿Por qué lo envía todo a los jueces, a la policía, al Tribunal Constitucional? ¿Por qué él, que tiene la máxima responsabilidad, no hace su trabajo que es hacer política? Yo no tengo la respuesta, porque no lo conozco tanto, como para responderlo. Creo que es una enorme irresponsabilidad el no hacer política, es una delación de la función principal que tiene el primer ministro. Reconocer que hay un problema político y proponer soluciones. Oiga, usted reconoce que hay un problema entre Cataluña y España porque lo ve todo el mundo, no sé si se ha dado cuenta. Él dice que no, si no reconoce que hay un problema, no se le puede exigir, no se siente obligado a proponer soluciones.
Han surgido críticas porque se dice que ustedes no tienen un padrón electoral ¿Se enviarán tarjetas electorales? y ¿cuál es su plan en caso de que los ayuntamientos no cedan locales de votación?
Nuestra responsabilidad es que la gente pueda votar en su ciudad. Si lo podemos hacer preferiblemente de acuerdo a las comunidades locales mejor. Pero nuestra responsabilidad es ofrecer las alternativas que las habrá y las hay. Segundo, hablamos de un referendo y así está previsto en la ley.