Los funcionarios de LATAM Airlines han llevado una minuciosa y delicada preparación y planificación para el traslado del Papa Francisco en su visita a Chile, entre el 15 y 18 de enero de este año.
La tripulación que estará encargada de atender a Jorge Bergoglio son seis personas escogidas según su desempeño en la empresa y características propias. Es así como estarán presentes tres Jefes de Servicio: Francisca Cepeda, Paula Podest, Carlos Ciuffardi; y tres tripulantes: Franco Neri, Diego Lyon y Carla Hidalgo.
Ayer atendió a la prensa Carlos Ciuffardi, el vocero de la tripulación que atenderá al Papa, quien arrastra una particular historia.
Amor en los aires
Carlos trabaja hace 10 años en LATAM. Es Jefe de Servicio al igual que su esposa, Paula Podest.
Se conocieron arriba de un avión, y han ido formando su vida "en el aire". Por eso, Carlos afirma que "se siente un orgullo y alegría inmensa. El avión es nuestra casa. Voy con mi señora, vamos todos juntos". Durante 2007, Paula Podest fue Jefa de Servicio a bordo de un avión de la entonces aerolínea LAN cuando conoció al recién llegado periodista Carlos Ciuffardi, quien había dejado su carrera para probar suerte en la tripulación de una nave bajo el mando de quien dos años después se convertiría en su esposa.
Ambos tripulantes fueron escogidos entre los mejores de la compañía. Podest fue premiada como "Líder de Servicio" en 2017, y Ciuffardi obtuvo el mismo reconocimiento en 2016.
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La tripulación del vuelo del Papa Francisco.[/caption]
Sin embargo, Carlos no siempre estuvo arriba, en los cielos. Entró a la empresa de vuelos como periodista y, después, se dedicó al servicio de auxiliar de vuelo. "Trabajé muchos años como periodista. Estuve en radio y en medios escritos, pero me di cuenta de que aquí tenía mucho más contacto con la gente", explicó. "Vi que se necesitaban tripulantes, y quise ver de qué se trataba. Con eso, le 'atiné'", agregó.
Tienen dos hijas, están casados por el civil, pero no por la iglesia. Es más, la pareja tenía fijada la fecha del matrimonio religioso para el 27 de febrero de 2010, pero el terremoto que afectó al país en ese tiempo impidió que se llevara a cabo la ceremonia. Así, ambos esperan que el postergado plan pueda concretarse en el avión, y dirigido nada más ni nada menos que por el mismo Papa Francisco.
Todos los días, Carlos atiende 600.000 personas, o 2.000 personas en una semana, estando a cargo de la vida y seguridad de los pasajeros. "La misión, ahora, es cuidar la vida y seguridad del Papa", afirma Ciuffardi, quien cree no es un trabajo fácil. Pero confía en el equipo: "Las características del equipo cumplen, en general, con todos los pilares que tiene la empresa: seguridad, calidez, buen servicio. Todo eso involucra la elección para llevar al Papa por Chile", finalizó.
