Tras un año fuera de pantalla y con un contrato con TVN que venció en octubre pasado, Carolina de Moras barajó opciones en Mega y luego en Chilevisión. Finalmente, llegó a acuerdo con estos últimos: la modelo firmó contrato por dos años con la estación de Turner Latinoamérica y su debut será en febrero próximo, como conductora de Fiebre de Viña, el espacio satélite que en sus dos versiones anteriores había sido conducido por Francisca García- Huidobro. Junto a ella estará Julio César Rodríguez. Además, De Moras se hará cargo de un programa diario femenino de corte social, que está preparando para más adelante en 2013.
"Me encanta la idea, porque me fascina él (Rodríguez), es un gran periodista y es bueno tener un súper partner", dice la conductora sobre su proyecto más inmediato. Respecto de la experiencia de estar en el espacio, añade: "Estoy emocionada por todos los artistas que voy a conocer, contenta por el equipo porque me siento apoyada". Y asegura que ya ha tenido varias reuniones y que la próxima semana el esquema y panelistas quedarán definidos, una vez que se presente el programa a los encargados del evento. Algo que sí está definido en el esquema del certamen es que la gala se realizará nuevamente en el casino de Viña del Mar, con una alfombra roja en sus afueras a cargo del equipo de Primer plano. Pero la petición para el próximo año es que se realice con un tono más amable y no tan "agresivo", como fue evaluada esta edición.
Tras el espacio festivalero, la modelo se dedicará al programa diario enfocado a la mujer y de corte social -el proyecto que la hizo decidirse a fichar por la estación privada-, que prepara el director Juan Pablo González -quien también realiza Fiebre de Viña- y que, pese a no tener hora definida, sí se sabe que irá en las tardes.
"Tenía ganas de volver a la televisión haciendo algo más concreto, que tenga que ver con la línea en la que quiero proyectarme", señala De Moras, añadiendo que "tras La Jueza o Caso Cerrado, que funcionan súper bien, queda claro que la gente necesita tener respuestas a muchas interrogantes. La idea es hacer un programa que se haga cargo de eso, porque hay un nicho que se puede explotar", dice, destacando que le gusta la idea de abordar un género que "tenga más contenido y que ayude". Además, apunta, agradece volver a hacerse cargo de un espacio diario, como ya lo hizo con Buenos días a todos, en TVN. "Tienen un ritmo constante, que te mantiene despierta todo el día y con continuidad", dice sobre la modalidad.
De Moras estuvo dos años en la red pública y salió de su matinal en diciembre del año pasado, siendo reemplazada por Karen Doggenweiler. Desde entonces participó en algunos pilotos al interior de la estación, que finalmente no se convirtieron en programas y, en el intertanto, se dedicó a participar en eventos y campañas.
Una fuente ejecutiva de Chilevisión comenta que "ella es un rostro emergente. Nuestra intención es que vuelva a ser ella, una figura fresca y espontánea".
Tiempo fuera
De Moras asegura que el año en que estuvo sin pantalla -sólo tuvo una participación en el docureality Adopta un famoso- le sirvió para digerir su paso por la televisión. "Me hizo bien tomar distancia, porque mi aterrizaje fue súper intenso y mareador. El año pasado creo me hice mujer a golpes. Entonces me sirvió para ir aprendiendo", señala. Y sobre su llegada a Chilevisión asegura que lo hace con humildad: "Tengo súper claro que aquí lo que prima es la experiencia y yo tengo que seguir aprendiendo".
Si bien reconoce que antes de que se le venciera su contrato con la señal estatal, el 31 de octubre pasado, mantuvo conversaciones para renovar, apunta que no existió ninguna oferta concreta. "Creo que uno cumple ciclos, y yo terminé el mío en TVN, concluí mi vida útil ahí y decidí emigrar. Había pasado un año sin proyectos y con una parrilla que no estaba afinada, ni con claridad de qué rostros se iban a hacer cargo de los proyectos", cuenta, y remata: "para mí es importante trabajar, no tener un contrato y no estar haciendo nada".
Además de la oferta de Chilevisión, también recibió llamados de Mega, para sondearla para su matinal Mucho gusto, y de Canal 13, para la versión nocturna del espacio de farándula Alfombra roja. "Había tenido otras conversaciones, pero todo muy ambiguo y poco concreto. Encontré que lo que me ofrecía Chilevisión era bueno", acota.
Por otra parte, existe otro proyecto de corte juvenil en el que De Moras podría incorporarse durante el próximo año. "Estoy muy orgullosa de que los equipos quieran trabajar conmigo", afirma. El espacio se abriría dependiendo del destino de Yingo, programa cuya continuidad está en evaluación, debido a que no ha logrado remontar en la audiencia.