Pequeños gigantes es el nombre de la nueva apuesta veraniega de Chilevisión. Con una emisión semanal, y debut para este domingo a las 22.30 horas, el espacio lo conducirá Carolina de Moras y cuenta con un jurado integrado por Amaya Forch, el dúo Power Peralta y Américo, mientras que los coach de los participantes serán Francini Amaral, Alvaro Véliz y Natalia Valdebenito.

El formato que presenta el espacio alude directamente a su nombre: el estelar solo cuenta con la participación de niños de 4 a 12 años y busca elegir al ganador mediante una competencia de seis grupos de cuatro concursantes cada uno. De esa manera, cada team está conformado por una pareja de bailarines, un cantante y un humorista.

El jurado Gabriel Peralta, miembro del dúo que hasta 2014 bailaba en el espectáculo que Cirque du Soleil dedicó a Michael Jackson en Las Vegas, se refiere a su primera participación en un programa de esta índole: "Nosotros estamos acá para incentivar a los niños, motivarlos y guiarlos con pequeños tips en esto que tanto les apasiona".

Por su lado, la animadora del Festival de Viña del Mar, admite estar muy cómoda con el formato del proyecto, ya que "es un programa para que comparta la familia y disfruten del talento, simpatía y espontaneidad de los niños".

¿Cómo se siente con este nuevo desafío en televisión?

Obviamente me gusta esto, porque estoy entrando en el formato familiar. Hay muchos momentos muy simpáticos, porque los niños son totalmente espontáneos y de repente ocurren cosas que nos sorprenden, así que disfrutándolo y pasándolo bien, trabajando fuerte para poder llegar a Viña, pero sin problemas. Igual, trabajar con niños es diferente, de pronto queremos grabar y están en hora de siesta, entonces están mañosos, esperamos que duerman y volvemos a grabar. Ha sido toda una aventura, pero yo lo tomé bien, como madre sé un poco de manejar y dominar a los niños; yo tengo una hija de cinco años, así que no desconozco para nada ese grupo.

¿Cómo se prepara para su otro gran desafío, el Festival de Viña?

Hago las cosas de manera simultánea. No es fácil pero ya vendrán las vacaciones. El año pasado fue más duro, porque era la primera vez, era más desconocido todo, entonces la preparación era con más ansiedad y con mucha más intensidad. Ahora igual estamos haciendo un trabajo grande y larguísimo, nos juntamos a las 9 de la mañana y salimos a las 7 de la tarde, estamos todo el día pensando con un grupo de guionistas, expertos en música y todo lo demás que se necesita.

¿Hay menos nervios, por tratarse de un escenario ya conocido?

La Quinta Vergara siempre te pone nerviosa, igual es un escenario súper distinto a este, aquí me siento cómoda, ya llevamos hartos capítulos que hemos estado avanzando. Estoy pasándolo bien

La industria cambió mucho en 2015. ¿Cuál es su análisis?

Para este 2015 hubo harta competencia y yo creo que va a seguir, al final todos los canales han tenido su ciclo y esto es igual que ir a la playa a surfear: te tocó una buena ola y estás arriba y la puedes tomar de buena manera, o de repente te tocó esperarla no más. Ojalá fuese un poquito más parejo, porque hoy las mediciones son poco representativas de lo que en realidad la gente ve y el interés de la audiencia.

Ante las posibles críticas que puedan llegar por su desempeño en Viña, ¿cómo las va a enfrentar esta vez?

Las críticas van a estar siempre, si no están, no es festival, es parte de la fiesta, es parte de la alegría, la euforia. Las críticas es como un pack completo. El Festival de Viña abre puertas y afuera fue súper bien recibido, cuando hicimos la gira, con mucho cariño, mucho empuje y yo creo que en Chile nos deberíamos concentrar un poco en potenciar lo nuestro, que nos ven de afuera también.