La Casa Blanca dijo que un informe mejor de lo esperado del mercado laboral en agosto es tranquilizador, tras una serie de "inquietantes" datos económicos, y reiteró que está trabajando con el Congreso para tomar medidas adicionales para estimular el crecimiento y el empleo.
La cifra de desocupación subió por primera vez en cuatro meses hasta un 9,6% en agosto. Sin embargo, destacó la menor destrucción de empleos (54.000 frente a una expectativa de 100.000) y la creación de 67.000 puestos de trabajo en el sector privado.
Wall Street subía 1% después de conocer el dato y los inversionistas se animaban a tomar riesgos entendiendo una estabilidad del mercado laborar estadounidense.