Un inversionista extranjero se convertirá en el principal actor del negocio de las farmacias en Chile. Esto, luego que el grupo mexicano Femsa anunciara ayer que adquirirá el 60% de la propiedad de Socofar S.A., matriz de Farmacias Cruz Verde, la que posee el 40,6% de la participación de todo el mercado nacional.

Sin embargo, no es el único actor foráneo que tendrá un peso relevante en la industria local, si es que las autoridades correspondientes aprueban la operación. Farmacias Ahumada, que posee el 27,7% de cuota de mercado, es controlada por el holding estadounidense Walgreen Boots Alliance.

De este modo, ambas cadenas totalizan 68,3% de participación de mercado, según cifras de la Fiscalía Nacional Económica (FNE). La otra grande entre las farmacéuticas locales, Salcobrand, de la familia Yarur, tiene el 23,8% de participación.

Toma de control

Femsa dijo ayer que valorizó a Socofar en US$ 998 millones, incluyendo su deuda neta, por lo que podría pagar por el 60% de la firma chilena unos US$ 600 millones para tomar el control.

Así, pasarán a ser los controladores de una red de 643 farmacias Cruz Verde y 154 tiendas de belleza Maicao, ambas marcas bajo el alero de Socofar. A ello, se suman las más de 150 farmacias Farmasanitas, que el grupo opera en Colombia. Un reporte de Femsa, cifra las ventas de Socofar en ambos países en US$ 1.836 millones, considerando los últimos 12 meses.

La operación también contempla que los actuales controladores de Socofar, la familia Harding, mantenga el 40% de la propiedad de la empresa. De hecho, Guillermo Harding seguirá liderando las operaciones como presidente del directorio.

Proyecto sudamericano

“Esta es la transacción correcta para nosotros, ya que nos provee de una gran plataforma regional de crecimiento”, dijo ayer Eduardo Padilla, director general de Femsa. “Socofar aporta un valor enorme no sólo a través de su robusta red de tiendas y su excelente capacidad de distribución, sino también a través de la amplia experiencia de su excelente equipo directivo y accionistas”, agregó.

En tanto, Harding explicó que la asociación de Socofar con Femsa permitirá al grupo “aprovechar oportunidades de crecimiento”. Además, agregó que “en los últimos meses Femsa Comercio y el equipo directivo de Socofar hemos desarrollado una visión en conjunto de cómo crear valor en el futuro”.

Mediante un comunicado, Socafar detalló más la asociación y explicó que le permitirá “desarrollar un proyecto a nivel sudamericano, que lo convertirá en el principal actor en el sector de retail y distribución farmacéutica de la región. Esta visión de negocio fue la clave a la hora de gestionar esta importante asociación”.

La negociación entre ambos grupos, que se alargó por casi un año, estuvo asesorada por el banco de inversión Rothschild, en el caso de Femsa, y por J.P. Morgan Securities y el estudio de abogados Barros & Errázuriz, en el de Socofar.

Cambios de propiedad

Esta adquisición se suma a los diversos cambios de controladores y fusiones que han vivido las principales cadenas de farmacias en los últimos años, luego que en 2008 estallara el escándalo de colusión en el que se vieron involucradas estas firmas.

En mayo de 2010, el grupo mexicano Casa Saba selló la compra de Farmacias Ahumada en una operación que bordeó los US$ 630 millones. Con esa adquisición, la firma mexicana buscaba convertirse en la mayor cadena latinoamericana de farmacias.

Pero ese deseo duró sólo algunos años, ya que en mayo de 2014 Casa Saba anunciaba que había firmado un acuerdo de venta de Fasa a la británica Alliance Boots. Y en agosto de ese año, el grupo europeo concretó la compra del 99,39% de la cadena de farmacias por un valor cercano aUS$ 620 millones, pasando a ser su nuevo controlador.

El 31 de diciembre de 2014, Alliance Boots concretó su fusión con la cadena farmacéutica estadounidense Walgreens, formando el mayor conglomerado global del sector, Walgreens Boots Alliance, que pasó a ser la nueva matriz de Fasa.

En el caso de Salcobrand, los cambios de propiedad han sido entre inversionistas chilenos. Un hito importante ocurrió en abril de 2007, cuando Empresas Juan Yarur S.A. compró la participación a las familias Selman, Colodro y Weinstein enUS$ 174 millones, convirtiéndose en el nuevo dueño.

En abril de 2012, la firma concretó su fusión con PreUnic, ligada a la familia Abuhabda. A través de esta operación, PreUnic se incorporó a la propiedad de Empresas SalcoBrand, participando del 30% del total. Posteriormente, en 2014, anunció un acuerdo para adquirir la cadena De Beauty Store (DBS). En medio de esos cambios y tras un largo proceso de litigios administrativos y judiciales producto del bullado caso farmacias, trascendió que Salcobrand también estaría en un proceso de venta.

FNE investiga

La entidad que actualmente está analizando minuciosamente si la compra de Cruz Verde por parte de Femsa conlleva riesgos a la libre competencia, es la FNE.

Su investigación se inició el 14 de abril pasado, tras los primeros trascendidos de prensa que daban luces sobre un eventual proceso de venta de la cadena.

“Esta fiscalía requiere realizar mayores indagaciones respecto a la operación, a fin de evaluar sus posibles riesgos anticompetitivos”, afirmó el persecutor económico en aquella ocasión.

Dentro de sus argumentos, expuso que la operación incide en un rubro de alto impacto y que la empresa posee una elevada participación del mercado. Tras ser consultada por La Tercera, la FNE dijo ayer que la venta de  Socofar a Femsa “es un antecedente público que va a ser analizado en el contexto de la investigación, que continúa abierta”.

La investigación de la FNE, sin embargo, no tendría que ver necesariamente con la entrada a su propiedad de un inversionista extranjero, dice Javier Velozo, socio de del estudio de abogados Aninat Schwencke & Cía. y ex ministro del tribunal de Defensa de la Libre Competencia (TDLC).

“Que dos grupos extranjeros posean el 70% de la participación de mercado de la industria, pero de forma separada y sin relaciones entre las matrices y los miembros de los directorios, no genera riesgos contra la competencia”, dijo Velozo. “Incluso, que dos grupos internacionales controlen empresas locales, podría tener un impacto positivo para la industria”, agregó.

Al respecto, explicó que “estos actores tienen acceso a mejores precios debido al tamaño de su escala y una logística más eficiente. Por lo tanto, si traspasaran esos beneficios a los consumidores, sería algo positivo”.

Mercado conocido

El mercado farmacéutico es, particularmente, bien conocido por la FNE, entidad que en 2008 inició una investigación por una eventual colusión de precios entre Farmacias Ahumada, Cruz Verde y Salcobrand. Un año después, el persecutor se requirió contra las tres cadenas ante el TDLC, acusando acuerdos de concertación de precios en 222 medicamentos.

De las tres cadenas, sólo Farmacias Ahumada reconoció parte de los hechos y, tras un acuerdo conciliatario, el pago de US$ 1 millón y otras medidas compensatorias, quedó excluida del fallo del TDLC que en enero de 2012 condenó al pago de cerca de US$ 19 millones a las otras dos farmacias y que por estos días sigue su tramitación en la justicia ordinaria.