Jaime Solís, ministro de la Corte de Apelaciones de Concepción, interrogó ayer durante más de tres horas al ex comisario de la PDI de Concepción Héctor Arenas, en una nueva diligencia para esclarecer la desaparición y muerte de Jorge Matute Johns.

La entrevista se realizó en el Palacio de Justicia penquista y en ella el ex detective entregó detalles de la investigación desarrollada desde que se perdió el rastro del joven sampedrino, en noviembre de 1999, hasta que fue hallado muerto, cuatro años después.

"La declaración versó principalmente sobre las conclusiones a las cuales habíamos arribado en nuestro informe y, por supuesto, se le proporcionaron otros antecedentes con posterioridad al informe que realizamos el 2001", explicó Héctor Arenas una vez terminada la audiencia, a la que llegó acompañado por dos detectives de la PDI.

El ministro Solís, en tanto, señaló que "las declaraciones son importantes, porque es la teoría que tiene Investigaciones acerca de los hechos. Lo que se trata de ver en estos momentos es si existen diligencias pendientes relativas a esos hechos y, sobre la base de eso, se reabre el sumario sobre esos puntos determinados", dijo el presidente de la Corte de Concepción.

RAYADOS
Uno de los hechos que toma cada vez más fuerza como uno de los detonantes de la desaparición y muerte del joven sampedrino son los rayados que recibió el auto de Jaime Lisperguer, ubicado a un costado del vehículo de Gerardo Roa, amigo de Matute, con quien éste llegó a la discoteque La Cucaracha el 20 de noviembre de 1999, última noche en la que fue visto con vida.

"Entre otros hechos, puede ser ese sobre los rayados al vehículo, para ver quién fue la persona que los hizo y ver si tiene alguna trascendencia esa determinación de acuerdo a la investigación que se haga", dijo Solís.