Una torta con el logo de la campaña del No esperaba ayer a los siete presidentes de partidos de la Nueva Mayoría en la sala de reuniones del PS, en el centro de Santiago, para conmemorar los 26 años del plebiscito de 1988.
El encuentro -que se inició a las 10 horas y en el que también participaron los secretarios generales de las colectividades- no sólo se limitó a recordar la fecha que marcó el fin del régimen militar. Otro de los temas abordados entre los líderes de la Nueva Mayoría fue el acuerdo político que explora la UDI con La Moneda, en el marco de la arista política del denominado caso Penta, en la que se mencionan posibles aportes irregulares de ese grupo empresarial a ex candidatos del gremialismo.
La conversación entre los timoneles oficialistas se dio luego de que trascendiera que el presidente de la UDI, Ernesto Silva, solicitó reunirse con el ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, para abordar este tema. "Me interesa tener la visión política que están teniendo", aseguró ayer el diputado en TVN.
Las opiniones dentro de la Nueva Mayoría respecto de los detalles de este acuerdo, sin embargo, son diversas. Es por esto que ayer los timoneles acordaron reunirse hoy a las 9.30 horas, en La Moneda, para abordar este eventual pacto y buscar fijar una postura común. Esto, antes de la cita del comité político que, de acuerdo a fuentes de gobierno, estará centrado principalmente en este asunto.
"Queremos llevar una opinión similar mañana (hoy) al comité político de los lunes, así que es un tema que está pendiente de resolver", dijo ayer el presidente del PS, Osvaldo Andrade. Lo mismo planteó el titular de la DC, Ignacio Walker: "Vamos a proponer una postura común que vamos a conversar, obviamente, con el gobierno, como es habitual, en las reuniones de comité político".
Una de las principales dudas que existen en la Nueva Mayoría respecto de la construcción de este posible acuerdo son sus alcances.
Mientras todos coinciden en que esta sería una buena oportunidad para lograr el apoyo de la oposición para sacar adelante la agenda de reformas políticas del gobierno -que contempla financiamiento de partidos-, existen colectividades, como el PC y el PS, que temen que esto, además, pueda implicar la intención de la UDI de solicitar que la arista política de la investigación que lleva a cabo el fiscal Carlos Gajardo no prospere.
La situación preocupa al gremialismo. Altas fuentes de gobierno sostienen que esta semana el Servicio de Impuestos Internos (SII) concretaría la presentación de una denuncia a la fiscalía, que entregaría nuevos antecedentes respecto de este tema. Incluso, en La Moneda dicen que esa acción podría producirse hoy mismo.
"Si hay un delito o algo que pase por la ley, tiene que ser aclarado y no hacer acuerdos para tapar eso. En eso nosotros vamos a ser muy tajantes", dijo ayer el presidente del PC, Guillermo Teillier, mensaje que fue reforzado por Andrade. "Si se establecen, a propósito de las investigaciones que se están realizando, responsabilidades respecto de eso, el acuerdo no puede ser parte de esas responsabilidades", advirtió.
FINANCIAMIENTO PÚBLICO
Si bien en la Nueva Mayoría destacan que un acuerdo entre la UDI y La Moneda podría abrir una buena oportunidad para conseguir el apoyo de la oposición y legislar respecto del financiamiento de los partidos políticos, al interior del bloque oficialista no existe una postura común al respecto.
Mientras que el líder del PS ya planteó que, a su juicio, los aportes reservados deben ser eliminados, Walker mostró ayer su disposición a lograr un "sistema mixto" de financiamiento, el que, a su vez, también es apoyado por el presidente de RN, Cristián Monckeberg. Este último dijo ayer que "nosotros creemos en el financiamiento público como una herramienta de mayor transparencia, pero también creemos en el financiamiento privado".
El mismo diagnóstico entregó ayer Silva. "Me gusta que exista la posibilidad de aportes reservados, como también que puedan existir aportes públicos y también de personas naturales", comentó.