Algunos parlamentarios y alcaldes de la UDI que no están involucrados en la investigación sobre aportes irregulares de Penta han comenzado a reclamar a la directiva de Ernesto Silva  estar expuestos a tener que dar explicaciones frente a sus electores.

Por ello, y luego de que la mesa comenzara a hablar de "responsabilidades individuales" en el caso, la presión interna para que las personas involucradas renuncien al partido ha aumentado.

Ayer, en la reunión de directiva se trató el tema. Y según algunos integrantes hubo consenso en torno a que, una vez solicitadas las formalizaciones por parte de la fiscalía, se les pedirá a los afectados que congelen sus militancias. Además, si alguno llegase a ser condenado, sería expulsado.

En ese sentido, admiten en la tienda, el caso más complejo es el del ex senador Jovino Novoa, quien  podría enfrentar un largo proceso judicial. Y pese a que varios comprenden la importancia de su figura para la UDI, también aseguran  que el partido podría rehabilitar su rol opositor, si él y el resto de los afectados, deciden congelar sus militancias.

Ayer, en tanto, tras una semana de silencio, la senadora Ena von Baer reapareció para referirse al mail que constata que pidió dineros a Penta y a una pasada entrevista de televisión donde lo negó. "Lamento sinceramente la confusión y las molestias generadas a partir de una entrevista en la que me refería exclusivamente al período electoral, y a la referencia a un correo enviado con fecha 13 de diciembre solicitando recursos después de mi campaña(...). Siempre actúo con la verdad y se debió a un error involuntario", dijo la parlamentaria.