Más de mil personas hicieron una larga fila durante varias horas ayer en Nueva York durante el csating que buscaba extras para la secuela de la película Sex & the city.

El primer filme basado en la popular serie fue recibido con indiferencia por la crítica durante su estreno en Estados Unidos en mayo del 2008, pero se ganó el corazón de los seguidores de la serie y otros aficionados al cine, recaudando 415 millones de dólares en todo el mundo.

El inicio de rodaje de la secuela está previsto para pocas semanas más y se espera que la cinta sea estrenada en el 2010.

Usando un vestido de noche de tonos naranja y oro y unos zapatos dorados de taco alto Amanda Rivera, una bailarina de 19 años del Bronx, llegó a la prueba de elenco junto a su padre a la 1.00 hora local para estar en la primera fila.

"Soy una aspirante a actriz y creo que esta será una gran oportunidad. Cualquier cosa pequeña es una buena exposición, incluso si se es un extra del fondo", dijo mientras se sentaba en la calle para descansar sus pies.

La agencia de elencos Grant Wilfley Casting indicó que buscaba "modelos, gente con estilo de celebridad, personas de la alta sociedad, fiesteros urbanos, gays y lesbianas, tipos internacionales (Oriente Medio, árabe, asiático, europeo, británicos) y jugadores profesionales de fútbol".

Algunas personas se encontraban un poco confundidas con el llamada para homosexuales. "Me iba a inclinar por el estilo de club nocturno, pero también pidieron gays y lesbianas y no sé cómo se ve eso, por lo que quizá también encaje", señaló entre risas Deidra Demens, de 22 años, una vendedora de zapatos de Brooklyn.

Benjamin Pastor, de 57 años y diseñador de interiores de Brooklyn, dijo que había estado tomando clases de actuación y que cree que podría interpretar a alguien en un club o al administrador de un local.

"A la larga Sex & the City representa una representación más joven de quien vive aquí", explicó. "Al ser un antiguo neoyorquino y en realidad parte del motivo del por qué la gente viene hasta aquí, hemos creado lo que es Nueva York, pensé que podría haber un espacio para alguien mayor de 50", señaló.