El líder revolucionario cubano Fidel Castro, intervino este lunes desde la distancia en la cumbre del Alba en La Habana para acusar al Presidente de Estados Unidos, Barack Obama, de ocultar una "ofensiva" a América Latina detrás de su "sonrisa amable" y su "rostro afroamericano".

En un mensaje leído por el Mandatario venezolano Hugo Chávez, Castro hizo referencia a que Estados Unidos reactivó el año pasado la Cuarta Flota de la Marina para América Latina y que, tras la toma de posesión de Obama, se ha producido el golpe de Estado en Honduras -del que el líder cubano responsabiliza a Washington- así como el controvertido acuerdo para el uso de siete bases militares en Colombia.

"Son obvias las intenciones reales del imperio, esta vez, bajo la sonrisa amable y el rostro afroamericano de Barack Obama", afirmó en el mensaje leído en presencia entre otros de los presidentes de Bolivia y Nicaragua, Evo Morales y Daniel Ortega, además del actual mandatario cubano, Raúl Castro.

En los últimos días, Chávez había mostrado su esperanza de que Fidel Castro acudiera a la cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA). Sin embargo, éste no se ha mostrado en público desde que abandonó la presidencia de la isla hace tres años y medio.

En su cumbre de dos días en La Habana, los nueve países miembro del ALBA conmemoraron el quinto aniversario de la fundación de este mecanismo de integración regional, creado por Chávez y Fidel Castro en contraposición al Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) promovida por Estados Unidos.

No obstante, Castro consideró que, después del fracaso del ALCA, "el imperio está de nuevo a la ofensiva" y "moviliza tras si a las fuerzas derechistas de América Latina para golpear a Venezuela, y con ella, a los Estados del ALBA".

"Si de nuevo se apodera de los cuantiosos recursos petroleros y gasíferos de la patria de Bolívar, los países del Caribe anglófono y otros de Centroamérica perderán las generosas condiciones de suministro que hoy le ofrece la Venezuela revolucionaria", escribió en su mensaje, en el que acusó además a Estados Unidos de estar llevando a cabo una "brutal carnicería" de civiles en Afganistán.

La cumbre del ALBA estuvo marcada por duras críticas a Estados Unidos. Ya en su apertura el sábado, Raúl Castro acusó al gobierno de Obama de llevar a cabo una "ofensiva hegemónica" para "ocupar y dominar a cualquier precio" la región.

El presidente cubano consideró hoy que el golpe de Estado contra el gobierno de Manuel Zelaya en Honduras "fue ejecutado con la complicidad de los círculos más reaccionarios de Estados Unidos", al tiempo que calificó de "espurias" las elecciones del pasado 29 de noviembre en el país centroamericano, "llevadas a cabo en medio de la brutal represión de los golpistas y el respaldo abierto o disimulado de las fuerzas políticas retrógadas de la región".

Honduras estuvo representada en la cumbre del ALBA por la ministra de Relaciones Exteriores del derrocado Zelaya, Patricia Rodas, después de que éste no recibiera un salvoconducto del gobierno de facto hondureño para viajar a La Habana.

La declaración final de la cumbre considera que el golpe militar del pasado 28 de junio tuvo como "propósito frenar el avance de las fuerzas del progreso y de la justicia social en ese país y en la región América Latina y el Caribe".

El texto exige además una América Latina libre de bases militares extranjeras y considera "inaceptable" que Washington utilice la lucha contra el tráfico de drogas y el terrorismo internacional para ampliar su presencia militar en América Latina: "El verdadero objetivo de esta presencia es el control de los recursos económicos, el dominio de los mercados y la lucha contra los cambios sociales".

Sobre todo Venezuela considera una amenaza para su seguridad el acuerdo para la utilización de siete bases militares en Colombia por parte de Estados Unidos, rubricado entre Bogotá y Washington. El ALBA instó al gobierno de Colombia a reconsiderar dicho acuerdo, y defendió el "justo derecho" de Venezuela a alertar sobre el "claro riesgo" que supone para su seguridad la presencia de fuerzas militares estadounidenses cerca de sus fronteras.

En su intervención, Morales consideró que el ALBA "no es el eje del mal, sino el eje por la humanidad" y que ha conseguido "muchos resultados" en el terreno social en los últimos cinco años. Entre otros aspectos, destacó que tan sólo en Bolivia han sido operados de la vista gratuitamente 400.000 personas, gracias a programas médicos nacidos dentro de la Alianza Bolivariana.