Catalina Guerra tendrá rol clave en el trágico desenlace de teleserie Mujeres de lujo

"Me voy a vengar de Rony Palma (Héctor Noguera) por mí y por todas. Seré una especie de juez para que pague todas sus culpas y el mal que ha hecho", cuenta la actriz Catalina Guerra (40) sobre el desenlace de Mujeres de lujo, la teleserie nocturna de Chilevisión, que ayer promedió 19,4 puntos de rating (según cifras de Time Ibope), y que ha visto el retorno triunfal de una vieja conocida de este formato telesérico.

Con su personaje de "Perla", la actriz se convertirá en una pieza clave para el desenlace de la historia, ya que, como han adelantado imágenes, ella secuestra a Palma, el dueño del Club Esmeralda, donde viven estas "damas de compañía". "No puedo adelantar mucho sobre el final, pero Perla es la prostituta que ha contenido a todas las chicas del club, pero también ha planeado de alguna forma una venganza hacia Rony, por todo lo que él le ha hecho, ya que de alguna manera la tiene cautiva y no la deja ser libre", adelanta Guerra.

Y tal como afirman fuentes de la producción, al "raptar" a Palma, el personaje de Guerra de alguna forma se convierte en la mujer que logra desenmascarar al dueño de este club de prostitutas y así logrará vengar la muerte de su novia, a la cual Palma asesinó frente a sus ojos.

"La importancia de Perla es que es la única prostituta que conoce más a Rony y la que sabe todos sus oscuros secretos. Es un personaje que sabe todo lo  que está ocurriendo y va a revelar todo lo que esconde este ser tan maquiavélico", explica.  "Lo que pasa es que ella es independiente, su familia le dio la espalda cuando contó sobre su homosexualidad, pero Rony la tiene atrapada y ella está en deuda con él, por eso es su traba para escapar. Acá se tomará la revancha y le hará pagar".

Guerra cuenta la historia con un entusiasmo que, ella misma admite, no sentía hace tiempo. Ella es una vieja conocida de este formato al ser figura clave de las teleseries de Canal 13, en los 90, y tener un papel más secundario en TVN. Sus últimos trabajos en telenovelas los hizo en Cómplices (2006) y Corazón de María (2007), y se mantuvo alejada para dedicarse a otros proyectos como series y películas.

"Me sentía lista para volver y me gusta que haya pasado con un papel que no me pilla ni de 20 ni de 30 años, sino a mis 40, lo que me ha dado un baño de autoestima, de más pudor, de tener ganas de cuidar mi cuerpo, de ser capaz de verme como una mujer de lujo y bailar, estar tonificada. En esta etapa de mi vida, porque cuando uno cumple 40 te viene todo encima y te planteas todo tipo de cosas", dice la actriz.

Su próximo paso está en el mismo terreno. A fines de mayo comenzará a grabar la próxima teleserie de Canal 13, Primera dama, del director Herval Abreu (Machos), donde interpretará a "Bruna", la esposa de un Presidente de la República (Julio Milostich) que verá cómo es cambiada por una joven provinciana, papel a cargo de la actriz Celine Reymond, y cómo termina su matrimonio de 25 años.