La Cámara de Comercio de Santiago (CCS) manifestó su preocupación por la modificación al Código del Trabajo que resguarda el derecho de igualdad entre las remuneraciones entre hombres y mujeres, asegurando que introduce nuevas distorsiones las que atentan contra la eficiencia económica y desincentiva la contratación femenina.

El gremio recordó que en los últimos diez años la participación laboral de la mujer se incrementó en 5 puntos porcentuales, desde alrededor de 35% a poco más del 40%, sin embargo, pese al aumento reciente de la participación femenina en el mercado laboral, su nivel sigue siendo muy bajo en comparación a otros países latinoamericanos, que superan el 50%, o respecto a países desarrollados, algunos de los cuales bordean el 77%.

Según un estudio realizado por la CCS, " la aún relativamente baja incorporación de la mujer al mercado del trabajo dice relación con otros factores que nada tienen que ver con la brecha salarial que existe en Chile entre hombres y mujeres, sino más bien con las malas condiciones de acceso al empleo, particularmente derivadas del exceso de rigidez regulatoria. Las mujeres no acceden al mercado laboral en virtud de las escasas facilidades que se les brindan para equilibrar vida laboral y familiar".

Aunque la entidad reconoce que la ley sobre igualdad salarial viene a consagrar un principio general de igualdad en las remuneraciones, prohibiendo cualquier tipo de discriminación arbitraria, incluyendo entre otras las discriminaciones por género, advierte que  si esta discriminación tiene una justificación económica, por ejemplo, en mayores costos para el empleador asociados al trabajo femenino, entonces la imposición de la obligatoriedad de pagar iguales salarios generará un incentivo no deseado hacia una contratación más intensiva en hombres.

"Esto se traduciría en un mayor desempleo femenino y resultaría nefasto para el objetivopaís de incorporar más activamente a la mujer al mercado laboral. Más aún, la nueva ley incorpora mayores costos al empleo femenino antes inexistentes, como el riesgo de reclamos que enfrentará la empresa por supuestos incumplimientos de la nueva norma", afirma el gremio.

De la misma manera sostiene que "la ley de igualdad salarial lamentablemente no constituye una herramienta efectiva que incentive a la mujer a ingresar al mercado laboral y solamente se erige como una declaración de principios bastante ineficaz. En la experiencia comparada, la discriminación salarial persiste aún existiendo normas que reconozcan el derecho a la igualdad de remuneraciones por trabajo de igual valor".

Por ello, la CCS manifestó que para propender al crecimiento económico del país resulta indispensable incorporar de manera efectiva a la mujer en el mundo laboral.

En este sentido, las políticas en relación con la flexibilización del trabajo son bastante más útiles que una declaración de principios en cuanto a la igualdad salarial.

La desigualdad de la mujer en materia laboral se soluciona mediante herramientas concretas, que aprovechen los avances en tecnología tales como la posibilidad cierta del teletrabajo y mayores facilidades para el cuidado infantil, entre otras.