La mañana del martes, la vocera Cecilia Pérez se trasladó temprano al Congreso. La Moneda enfrentaba una crisis tras la renuncia a la presidencia de RN de Carlos Larraín, quien emitió fuertes críticas al Ejecutivo, acusando falta de manejo político. Esa mañana, durante casi una hora y media, la ministra escuchó los descargos del timonel. Con todo, afirma que los problemas que gatillaron la amenaza de dimisión son internos y remata que "como gobierno dimos vuelta la página".
¿Sorprendió al gobierno la profundidad de la crisis que se generó a partir de la salida del ministro Teodoro Ribera?
No me la esperaba. Siento que la salida de Teodoro, aun reconociendo todo lo que él significa para RN, no fue la causa. La renuncia de Larraín fue un cúmulo de cansancio, de una carga de tantos años llevando a sus espaldas la misión de que a RN le vaya bien.
Pero él resintió la manera en que se selló la salida de Ribera. Acusó falta de prolijidad y que la opinión de su partido no pesa.
A Carlos Larraín lo conozco, fui su secretaria general, le tengo respeto y mucho cariño, y porque lo conozco siento que él estaba muy cansado. No le ha tocado fácil, ha tenido que liderar un partido que enfrentó unas elecciones municipales que el resultado en términos generales -no sólo para RN- no fue el mejor, y tiene que estar al frente de un partido que tiene que sacar adelante una candidatura presidencial y unas elecciones parlamentarias. (Entonces) el llamado fue que necesitaba más apoyo.
Las razones que usted da son internas, ¿por qué cree entonces que él apuntó al gobierno?
Me imagino que es lo que siente y que tiene los dos sentimientos, el interno y lo que él ha señalado de poder coordinarse mejor con el gobierno. El sabe que RN y la UDI cuentan con cada uno de los ministros y con el Presidente.
¿Larraín estaba al tanto de la inminente salida de Ribera?
El habló conmigo el fin de semana, tengo entendido que habló con Andrés Chadwick, evaluamos la situación, o sea, no era un escenario inesperado. El realismo político decía que finalmente Teodoro iba a presentar la renuncia.
En RN reclaman que la sucesión de Patricia Pérez estaba resuelta antes de que se solicitara la terna de reemplazantes.
Me consta que frente a la renuncia de Teodoro hubo muchos nombres sobre la mesa, entre ellos el de Patricia Pérez, y cuando el ministro Chadwick, en una reunión que tiene con RN el lunes, pide nombres, el partido entrega tres nombres, dentro de los cuales venía la ministra Pérez. El ministro Chadwick se lo comunica al Presidente y el Presidente ve que viene Patricia Pérez, que era uno de sus nombres y termina decidiendo por ella.
No se puede quejar RN entonces, las formas estuvieron bien…
Dentro del tiempo en que se tomó la decisión, era lo que había que hacer y fue la primera llamada que se realizó a ambos timoneles.
El subsecretario Ubilla también estuvo envuelto en una polémica investigada por la justicia -el caso sobreprecios-, ¿por qué, a diferencia de Ribera, él no salió?
En el caso de Teodoro Ribera si bien no hay comisión de delito ni de hecho ilícito, él aparecía políticamente, comunicacional y públicamente en primera persona involucrado. Eran hechos que lo relacionaban a él directamente, en cambio lo del subsecretario Ubilla decía relación con una situación que pasó en la cartera de la subsecretaría. Los hechos son distintos y la participación de protagonista que tenían unos y otros.
¿Ese es un criterio definido en el gobierno, que si estás directamente involucrado es causal para renunciar, pero si hay problemas en tu cartera vas a contar con el respaldo del gobierno?
Todas las situaciones se evalúan en su mérito y el Presidente toma las decisión que hay que tomar. No hay una regla establecida
¿Afectaba al gobierno la renuncia de Larraín?
Afectaba a RN.
¿No al gobierno?
Afectaba a RN, a los militantes, los presidentes regionales, distritales, a la mesa entera que iba a renunciar, y como gobierno queremos que nuestros partidos estén bien, que no tengan crisis, que no haya conflictos.
Como militante de RN, ¿a usted le han dicho que RN se siente maltratado por este gobierno?
No. Nunca me han dicho algo parecido. Acá no existe maltrato, jamás podríamos maltratar a un partido aliado, a un partido nuestro.
En RN se quejan de que la UDI tiene múltiples voces para ser escuchado, partiendo por el ministro del Interior y, en cambio, hay poca presencia de representantes del partido del Presidente.
No es así. En RN siempre dijimos que la libertad del Presidente para armar su gabinete era absoluta y el Presidente tuvo y tiene la libertad y la ejerce para poder poner en cada una de las carteras a las personas que puedan sacar adelante sus proyectos emblemáticos.
¿No hay un mea culpa del gobierno por el episodio?
La disposición de cada uno de nosotros, del gobierno y del Presidente siempre ha sido la mejor con los partidos políticos.
¿Por qué dolieron tanto las críticas de Allamand respecto del déficit político del gobierno?
Más que dolor siento que fueron poco comprensibles e innecesarias sus palabras, viniendo de una persona que hasta hace pocas semanas estaba en un ministerio tan estratégico como Defensa. Siento que los canales en situaciones como estas deben ser en privado o directo con el Presidente.
A usted le gusta el fútbol. En la semana decían que usted actuó con "violencia innecesaria", porque las críticas de Allamand no son desconocidas.
Cuando existe una mejoría en las coordinaciones internas de los partidos, de las candidaturas, tenemos un mejor escenario para como gobierno mejorar las coordinaciones entre todos. Siento muchas veces que es injusto solamente criticar las falencias eventuales que puedan existir en el gobierno, cuando lo lógico es partir por casa.
¿No pensó que podía golpear a un abanderado oficialista por las críticas que le hicieron cuando habló de "lealtades superiores"?
No. Lo dicho, hecho. Jamás haría nada para dañar a las candidaturas.