La Central de los Trabajadores de Argentina (CTA), una agrupación sindicalista opositora llamó hoy a una huelga nacional en octubre para repudiar el aumento "vergonzoso" del sueldo mínimo.
El secretario general de la CTA, Pablo Micheli, ratificó la medida de fuerza al considerar que la reunión del Consejo del Salario Mínimo celebrada ayer martes fue "una parodia".
El Consejo del Salario, integrado por representantes del gobierno, el sector empresario y sindicalistas, aprobó un aumento del salario mínimo vital y móvil en dos tramos: un alza del 16% a partir de septiembre y otro para llegar a un total de 25% en febrero, con 2.875 pesos (619 dólares, unos 297 mil pesos chilenos).
"Es una deformación de una herramienta histórica de la democracia, lo han transformado en un acto kirchnerista en el que se juntan los amigos del gobierno para fijar un salario mínimo que está fuera de cualquier parámetro lógico", denunció Micheli.
El líder de la central obrera señaló que "fijar un salario de 2.875 pesos para febrero de 2013, teniendo en cuenta que en Argentina hay una inestabilidad económica bastante preocupante en los últimos meses y un enfriamiento de la economía, es no tomar en cuenta lo que está pasando, no reconocer que efectivamente hay una línea de pobreza por encima de esa cifra".
El nuevo salario mínimo de 2.875 pesos no alcanza a cubrir la canasta básica que fija la línea de pobreza para una familia de cuatro integrantes, que según organismos provinciales de estadística es de 3.114 pesos.
El líder de la Confederación General del Trabajo (CGT), el ahora opositor Hugo Moyano, advirtió que este aumento no alcanza a cubrir el alza de la inflación, que según cálculos privados y provinciales rondaría este año al menos entre el 24 y el 26%.
El secretario general del gremio de peones rurales y cercano de Moyano, Gerónimo "Momo" Venegas, consideró que "el salario está deprimido, no se ajusta a la realidad, no cubre las necesidades insatisfechas de todos los trabajadores". "Nosotros estábamos pidiendo 3.500 pesos", advirtió.
En cambio, el secretario general del gremio de la construcción (UOCRA) y aliado al gobierno, Gerardo Martínez, evaluó que en Argentina "la inflación no es preocupante" y responsabilizó de la subida del costo de vida a los "especuladores" que atan los precios al valor del dólar.
"Argentina está mostrando crecimiento con un cierto nivel de inflación, como sucede en otros países, pero que no es preocupante porque tenemos la oportunidad de discutir paritarias, actualizar el salario real y tener un diálogo permanente que genera una cláusula gatillo en relación de cómo está el proceso económico interno", afirmó Martínez.