La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) mantuvo su proyección para el crecimiento de la economía chilena este año en 1,6%.

Sin embargo, el organsimo bajó la estimación para el Producto Interno Bruto (PIB) de América Latina, previéndose una contracción de 0,8% frente a la caída de 0,6% esperada en abril.

La economía de la región sería afectada por el complejo escenario que enfrenta Brasil y caídas mayores a las previstas en Argentina y Venezuela, dijo a Reuters la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena.

El nuevo retroceso que se prevé en la región, luego de la caída de 0,5% el año pasado, está marcado por una situación adversa en comercio exterior e inversiones debilitadas.

"El momento económico que vive la región son shock de términos de intercambio, en donde siguen cayendo los precios de las materias primas", dijo Bárcena.

"Con estas cifras y números, lo que se puede determinar es que va a ser más caro el financiamiento, pero la región seguirá teniendo acceso", agregó.

Bácerna dijo que la desaceleración regional es heterogénea y Sudamérica es el bloque que resulta más afectado, con una caída estimada de su Producto Interno Bruto de un 2,1% este año. "Las que nos tiran para abajo los pronósticos son Argentina, Brasil, Ecuador y Venezuela", dijo Bárcena.

En el caso de Brasil, la mayor economía de la región, Cepal mantuvo su proyección de una contracción económica del 3,5 por ciento este año, debido a nulas señales de repunte de sus principales motores de crecimiento.

Bárcena destacó que la mantención de una elevada tasa de interés y su apreciación cambiaria son dos temas que están conteniendo la expansión del crédito y las exportaciones en Brasil.

"Los números de producción, comercio y servicios en Brasil todavía no hablan de una recuperación necesaria para una menor caída en 2016 (...) en el corto plazo hay desafíos muy fuertes en materia fiscal y en el mediano plazo está retomar las inversiones", dijo Bárcena.

En contraste destacó que la economía de México se expandiría un 2,3%, mientras que Centroamérica aumentaría un 3,8%.

En el desempeño de la región, figura además la baja mayor a la pronosticada en Argentina, con una caída del 1,5% (desde un cálculo previo de 0,8%), y en Venezuela con un desplome del PIB de 8% desde una baja de 6,9% condicionado por el precio del petróleo y de las importaciones.

Pese a la caída en los precios de las materias primas, Bárcena destacó que la economía colombiana crecería un 2,7% este año, mientras que Perú mostraría una expansión del PIB del 3,9%.