Escuchando atentamente cada canción que entona Paul McCartney en su prueba de sonido, que a esta hora se sigue llevando acabo, se encuentran las alrededor de 10 mil personas que, según personal de Carabineros, ya están a la espera de que se abran las puertas del Estadio Nacional para ver al artista.
Pese a que las puertas del recinto se abrirán recién a las 17.45 horas, ya hay filas en todas las entradas del estadio por avenida Grecia, donde se efectuará el ingreso de las personas con tickets no numerados (el resto lo hará por avenida Marathon).Los fanáticos esperan el segundo show en Santiago de su ídolo, quien llegó anoche a la capital en un vuelo privado proveniente de Perú, junto a su novia -y futura esposa-, Nancy Shevell.
Algunos de ellos quisieron asegurarse y se instalaron anoche afuera del recinto, como Néstor Quezada, de Talagante, quien llegó al estadio junto a un grupo de amigos que no superan los 18 años, a las 21.00 horas de ayer. "Esta será la primera vez que lo veamos en vivo y quizás la última", cuenta el joven, que llevó latas de atún y chocolates para la espera.
Otra de las primeras en llegar al Nacional fue Gloria (32), quien junto a su primo fueron de los pocos que llevaron sacos de dormir e incluso una carpa para pasar la fría noche afuera del estadio. "El 93 no pude verlo, pero ahora no me lo podía perder", explica esta fanática de The Beatles desde los 8 años, cuya canción más esperada para esta noche es Hey Jude.
También desde temprano han comenzado a darse vueltas en el lugar algunos vendedores, portando poleras y jockeys con la cara de McCartney Los productos se mezclan con los confeccionados por los propios fans, donde destacan banderas de Chile o Reino Unido con mensajes para el ex Beatle.
El concierto del artista británico está programado para las 21 horas, pero como telonero actuará el DJ estadounidense Chris Holmes, a partir de las 19.30 horas. El estadounidense estará una hora en el escenario, tras lo cual se proyectarán hasta el inicio del show principal una serie de imágenes de las diversas etapas de la trayectoria de McCartney en las pantallas gigantes instaladas en el estadio.