Según el estudio Determinación de la Erosión Actual y Potencial del Territorio de Chile, realizado por el ministerio de Agricultura, el 49,1% del territorio nacional, que equivale a 36,8 millones de hectáreas, presenta algún grado de erosión.
El estudio fue presentado por el ministro de Agricultura, José Antonio Galilea, junto al director ejecutivo de Centro de Información de Recursos Naturales, Ciren, Eugenio González Aguiló.
Los sectores que mayores problemas presentan, según el ministro Galilea, son las regiones de Coquimbo, con el 84% de sus suelos erosionados, de Valparaíso, con un 57% y de O'Higgins con el 52% de sus suelos erosionados.
Para cualificar la erosión actual de un suelo, existen seis categorías: erosión muy severa, erosión severa, erosión moderada, erosión ligera, erosión no aparente, y sin erosión. Según este sistema de medición, Galilea señaló que la región con los índices más altos de erosión severa y muy severa es la de Coquimbo, con un 65,3%. Luego de ella viene la Región de Valparaíso, con 38,1%, y finalmente está la de O'Higgins con 37,6%.
Respecto sobre las regiones que en los próximos años pueden aumentar su erosión, los mayores índices de riesgos de erosión potencial severa y muy severa son las regiones de Valparaíso (75,8%), Aysén (73,9%) y Coquimbo (72,1%). La Región de Aysén, en tanto, es la que posee la mayor superficie de riesgo de erosión potencial.
Sobre esta situación, el ministro Galilea señaló que "lograr que un desierto vuelva a ser fértil es una tarea de siglos, pero que los suelos fértiles pierdan su condición, cuesta muy poco. De ahí entonces la importancia de tener una radiografía del momento, que nos permita conocer y evaluar la situación y que a la luz de lo que hemos conocido esta mañana, es preocupante".
El Estudio de Determinación de la Erosión Actual y Potencial del Territorio demoró tres años en llevarse a cabo y costó 920 millones de pesos. Su área estimada de análisis fue de 75 millones de hectáreas que equivalen a todo el territorio continental del país.