Con 14 años en el mercado, Cervecerías Kross, una de las compañías pioneras de la cerveza artesanal en el país, está buscando seguir creciendo a toda costa. Así lo afirma José Tomás Infante, co fundador de la firma, quien desde el Krossbar ubicado en Providencia, detalla a La Tercera los principales planes para 2018, en los que destaca construir nuevos bares y buscar nuevos mercados de exportación.

Con un crecimiento de 20% en el 2017, en comparación al 13% de la industria de cerveza artesanal del país, Infante explica que para Kross el debut de su primer bar en julio del 2016, "fue fundamental para su crecimiento". De hecho, indica que ya están en conversaciones con actores de varias comunas para abrir un segundo bar en Santiago, con el objetivo de seguir acercando la marca a los consumidores.

"Hicimos el Krossbar porque veíamos la necesidad de tener un punto de venta propio, cosa de que podamos entregar la experiencia cervecera Kross que queríamos entregar", indica. "Ya llevamos 15 meses y ha sido un boom". Detalla que es un local que hoy atiende 10.000 personas al mes, 2.500 a la semana, con un ticket promedio de $11.000 por persona. Esto, pese a al crecimiento más reducido que ha tenido el país en los últimos años, que a su juicio, Kross a sabido enfrentar bien. "No sufrimos un impacto porque creemos que el consumidor castiga lo restaurantes de un ticket promedio más alto. Nuestro local hoy factura US$ 2 millones al año".

Por esto, Cervecerías Kross se encuentra en conversaciones para construir un nuevo bar en Santiago durante este año, y así continuar compitiéndole a Kunstmann, que además de Kross, es la única marca de cerveza artesanal que tiene su propio bar.

"Estamos viendo locales y sectores; nos gusta Providencia, Ñuñoa, Irarrázabal, Las Condes y La Reina. Nuestro desafío es ver cómo acercamos la marca y la cervecería a nuestros clientes para que ellos puedan tener un bar de barrio que les queda cerca de la casa", dice.

Regiones

Además de Santiago, Kross tiene la mirada puesta en expandirse en regiones, empezando por Concepción y Valparaíso.

"Concepción para nosotros es un tremendo mercado, tenemos hartos clientes en ahí, además es una sede universitaria. Valparaíso, en tanto, está muy cerca de nuestra cervecería en Curacaví, lo que es clave para nosotros", dice.

Otros planes

Además de la mirada local, Kross tiene entre sus planes buscar nuevos mercados para exportar su cerveza, que ahora solo llevan a Alemania y Australia en pequeñas cantidades. Para esto, Infante explica que su alianza con Concha y Toro será fundamental en este proceso.

"Queremos este año entrar a Brasil, en países nórdicos como Noruega Finlandia y Dinamarca y estamos viendo Canadá como oportunidad. Para esto estamos conversando con las oficinas comerciales de Concha y Toro", explica. "Como tenemos un socio que tiene una red muy potente a nivel mundial nos anima a explorar esas oportunidades. Sabemos que hay demanda a nivel internacional de cervezas artesanales", añade.

Consultado acerca de la fuerte competencia en la industria de la cerveza artesanal, Infante explica que la industria ha tenido bastante dinamismo y que hoy sus grandes competidores son las cervecerías industriales.

"Creemos que la competencia está bien movida y eso siempre va a ser buen. Si bien con los artesanales competimos en las góndolas sentimos que tenemos más un objetivo en común; hacer crecer el consumo per cápita de cerveza artesanal en Chile que hoy alcanza 1%", finaliza.