El volcán Chaparrastique, en el este de El Salvador, dejó de lanzar gases y cenizas horas después de una "súbita" erupción que obligó a evacuar a más de 1.600 personas, informó el presidente salvadoreño, Mauricio Funes.

"Las emanaciones de gases y cenizas terminaron y el viento ha permitido que poco a poco el panorama se vaya despejando", afirmó Funes en un mensaje en cadena nacional de radio y televisión.

El volcán, situado en el departamento de San Miguel, hizo erupción a las 10.32 hora local del domingo (12.32 en Chile), cuando de su cráter salió una enorme columna de ceniza que se expandió a varias zonas del territorio salvadoreño.

El presidente insistió en que la población atienda las recomendaciones de las autoridades, e indicó que vulcanólogos y otros científicos del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales vigilan el comportamiento del volcán.

"No tenemos certeza de que vayan a producirse nuevas erupciones, pero tampoco podemos descartarlas", advirtió Funes.

Agregó que desde que se produjo "esta súbita erupción" instruyó a la Dirección de Protección Civil y otras instituciones del Estado para atender la situación.

"Durante todo el día y parte de esta noche hemos evacuado hacia los albergues a un total de 1.635 personas" de la parte alta del volcán, y "esta cifra podría aumentar en las próximas horas", agregó el gobernante salvadoreño.

Por otra parte, varias aerolíneas suspendieron vuelos hacia o desde El Salvador como medida preventiva por la presencia de la nube de cenizas expelida por el volcán, aunque el aeropuerto internacional no ha cerrado sus operaciones y el tráfico aéreo en general se mantiene normal.

La gerente del aeropuerto, Yicsi Rodríguez, informó a periodistas de que las aerolíneas estadounidenses American y Delta suspendieron un vuelo cada una, y otro la española Iberia, que procedía de Guatemala con destino final en Madrid.

La colombiana Avianca anunció en un comunicado que suspendió 33 vuelos programados en horario nocturno.

Rodríguez dijo que Avianca prevé normalizar sus vuelos a partir de este lunes, subrayó que las suspensiones fueron "por decisión de la casa matriz o de las tripulaciones" y reafirmó que el aeropuerto, unos 44 kilómetros al sur de San Salvador, "está operando con total normalidad".

Las autoridades mantienen alerta naranja (alto riesgo) en la zona del volcán y alerta amarilla (preventiva) en el resto del país.