"La vida cambió, porque no tiene descanso ni de noche ni de día", es lo primero que dice César Barros Montero para describir su nueva posición: presidente de La Polar, la cuarta cadena de retail del país, envuelta hoy en una grave crisis de la que intenta salir a través de negociaciones con acreedores, un aumento de capital y cambios en la plana ejecutiva y en el directorio. Hace dos viernes, ejecutivos del mercado de capitales invitaron a Barros a dirigir la crisis. "Yo tengo esa cosa juvenil, a pesar de la edad, de atreverme. Yo creo que no habría sido yo si me hubiera negado", confidencia el ingeniero agrónomo de 61 años.
Pero tuvo una razón más de fondo. "El convencimiento íntimo de que el sistema crediticio a la clase media emergente y a la clase baja en Chile, al igual que con la pyme, que ha sido un tema recurrente conmigo, puede tener un antes y un después mucho más favorable si esto se soluciona bien", dice.
No es primera vez que lo plantea. En julio de 2008 escribió una columna en La Tercera donde alertaba por el otorgamiento de créditos de manera indiscriminada a "quienes nadie prestaba", lo que elevó los retornos, pero también los riesgos. "Que Dios nos libre de una crisis subprime criolla", escribía Barros ese año.
¿Qué pasó en La Polar? ¿Hubo fraude? ¿Armaron una máquina que no supieron desmontar?
Me encantaría contestar la pregunta, pero es algo que está viendo la fiscalía. Es que no quiero anticiparme, porque creo que sería súper injusto. Yo creo que acá hay un sistema judicial que es creíble. Yo llego a tratar de enderezar este buque y el tema judicial está entregado a Davor Harasic. A él se le pidió que cuando considerara que había casos legales posibles, factibles, hiciera la acusación, y que, si era necesario, la hiciera con nombre y apellido.
Eso es inédito. ¿Por qué lo hicieron con nombre y apellido?
Las querellas sin nombre y apellido suenan a sopa sin ave.
¿Esto a qué se parece más: al caso Enron o a la crisis subprime?
Linda pregunta. Sería el caso Enron si ésta fuera la única empresa de retail que tiene tales prácticas. Y ojalá que sea.
¿No tiene la certeza de ello?
El tema de fabricarle deuda artificialmente a la gente, vendiendo una plancha de $ 12 mil a una persona en 24 cuotas al 4% mensual, es algo que no resiste análisis. Es un tema que hay que dejar atrás.
¿Y que no es privativo de La Polar?
No, no es privativo.
Lo que sí es privativo de La Polar es la repactación unilateral.
Eso se parece más a Enron, que es un caso único.
¿Qué debe cambiar?
Hay una dicotomía que es seria, hay una especie de fractura en este país que está entrando a la Ocde, pero que, sin embargo, tiene una educación que es insatisfactoria y un sistema de crédito que es súper adecuado para las empresas grandes, pero que para la gente modesta es definitivamente muy caro. Las tasas del retail debieran reflejar el riesgo y también la capacidad de pago de la gente. Hay una ecuación que no es necesariamente correcta entre el riesgo y la tasa que le vas a cobrar. ¿Por qué si alguien es muy riesgoso, en vez de no prestarle le vas a prestar a una tasa enorme para meterla en un problema más grande?
¿Qué cree que se debe hacer?
Aquí regulamos a la banca a la sombra de la gran crisis del año 82-83. Cuando ves que la banca chilena tiene niveles de morosidad tan bajitos te hace dudar de si están en otro país o si de frentón la regulación no los deja entrar a los sectores más bajos, sean pymes o personas. Y al ser esa regulación tan restrictiva, se permitió que otro tipo de instituciones entraran al baile: los retailers, en el caso de
las personas, y los factoring, en el caso de las empresas.
Y el sistema de financiamiento del retail, ¿funciona bien o mal?
En La Polar funcionó mal, pero cuando miras las tasas en general del retail, no me cuadra. No me cuadra.
¿Debe aumentar la regulación?
Yo creo que la industria del retail tiene que sentarse seriamente a reflexionar qué tan sustentable es. Si los salmoneros nos hubiéramos sentado antes del virus Isa hubiera sido mucho mejor que haberlo hecho después. La gracia es adelantarse a los problemas y no reaccionar después que estos suceden. Ahora, todo el mundo dice que este es un tema de La Polar y todo el resto somos unos artistas geniales. Me suena a los primeros meses en que apareció el virus Isa. La regulación tiene que ser buena, constante. Cuando uno regula mal, de repente tiene consecuencias de muy largo plazo que pueden ser negativas. Es algo que debe hacerse con cuidado. No puede hacerse de golpe y porrazo. Una mala regulación es peor que una no regulación, normalmente.
¿Qué otras cosas cambiarán?
También esto señala un antes y un después para los directorios de las empresas abiertas. De aquí en adelante, ser director de empresas va a necesitar mucho más tiempo y un pago distinto. Lo mismo respecto de evaluadores de riesgo y auditores. Ahí hay una rabia mundial contra todos ellos, porque el sistema está mal parido. Si el auditor es pagado por el auditado y el clasificador por el clasificado, ahí hay un conflicto de intereses.
OTRO AUMENTO DE CAPITAL
¿La Polar es viable hoy con un patrimonio negativo y millones de dólares en deudas?
Yo ví una industria salmonera con un capital negativo mucho más grande que La Polar y con deudas que eran el triple. Y salió. Es un caso distinto, pero se puede. Yo creo que en la medida en que haya cooperación de acreedores, inversionistas y del gobierno, en términos de no boicotear el proceso, por supuesto, porque hay una marca que es valiosísima.
¿Cambiará el modelo de negocios que hoy sustenta la mitad de sus ingresos en créditos?
Este es un retailer y no puede ser un megabanco; hay que volver a las raíces.
¿Quién va a hacer ese nuevo plan de negocios?
El nuevo directorio.
¿Quiénes lo integrarán?
Los accionistas tienen que nombrarlo.
¿Será necesario un nuevo aumento de capital?
Tenemos que ver los números, pero si tú me fuerzas, probablemente sí. Pero hay que verlo. El 31 de julio Deloitte nos va a tener el informe de la cartera y en agosto vamos a tener un balance, que hay que hacerlo entero de nuevo, porque está cuestionado el antiguo. Hacer un balance desde cero es complejo.
¿Sería bueno que La Polar tenga un controlador?
Creo que lo que La Polar necesita es capital y liderazgo. Hay en el mundo empresas sin controlador que funcionan súper bien y empresas con controlador que funcionan súper mal. En la medida en que haya un controlador que sea claro en su negocio y que tenga una buena visión del negocio, es bueno.
¿Ha hablado con Alvaro Saieh, quien compró un 10%?
No. Yo lo conozco, somos viejos conocidos, creo que es un gran empresario, que tiene la gracia de haber partido de cero.
¿Se desatará una pugna por obtener el control de la compañía?
No tengo antecedentes de que algo así pudiera suceder.
La expansión a Colombia, ¿sigue en pie?
Sigue en pie y se está analizando. Tenemos que ir avanzando, pero el primer gran avance será el nuevo directorio. Hoy todos los directores están siendo llamados a declarar, hay un problema.
¿Hay que cambiar entonces el directorio completo?
Yo no soy quién para decir nada. Yo quisiera tener un directorio afiatado, tranquilo, con buenos conocimientos, que sea capaz de arremangarse y trabajar para armar un cuerpo ejecutivo. Requiere de un buen abogado, requiere de alguien que sepa de retail y que sepa de créditos, y alguien que sepa de finanzas.
¿Cambiarán los stock options?
Los stocks options, que estuvieron de moda durante fines de los 90 y principios de los 2000, a raíz de la crisis subprime y también a raíz de esto, van a tener un cierto retroceso. Los ejecutivos tienen que hacer bien la pega y uno tiene que pagarles bien si la hacen bien y echarlos si no, pero mezclar el rol de accionista con el del ejecutivo es un tema que puede llevar a mucho desorden.
¿El gerente general nuevo es Eduardo Bizama?
Fue nombrado por el directorio anterior. Mientras, tenemos un gerente general interino y yo estoy manejando una crisis. Como dicen en el curso de oficiales: lo único que es imperdonable para un oficial es la inacción.