Francisco López llegó feliz a su carpa de asistencia, la de Tamarugal. No sólo había disfrutado a concho de la primera etapa del Dakar 2013, sino que sabía que había ido a fondo y la moto KTM le había respondido a cabalidad. Poco después sabría que era el ganador de la especial, un corto recorrido de 13 kilómetros por unas dunas cerca de Pisco, en Perú, después de recorrer 250 kilómetros desde Lima, en un enlace.
"El balance fue bastante bueno, porque en la mañana venía preocupado, porque venía, no sé si decir con sueño, pero con flojera, el calor… y pensé que tal vez eso se podía repetir en estos 250 kilómetros (de enlace). Tenía un poco de miedo en la partida de que me pasara eso arriba de la moto, en competencia, pero fue completamente diferente: me desperté, me motivé y sentí buena sensación con la moto", contó.
"Chaleco" fue uno de los protagonistas del podio de partida en la zona de Chorrillos, donde miles de limeños llegaron a despedir la prueba, que partía su camino hacia el sur. "Estoy bien emocionado por la cantidad de gente en la partida", dijo López, quien aseguró que ayer nunca llegó a la quinta marcha de su KTM. "Había mucha duna", explicó.
"No me tiré tan rápido, porque uno puede perder mucho y ganar poco, pero tratar de estar en los lugares de avanzada es bueno, porque sé que las de Perú van a ser etapas muy difíciles, y el año pasado no hice esta zona, así es que debo ser muy inteligente".
Con este resultado, "Chaleco" López suma siete etapas ganadas en su historial en el Dakar, superando por una las seis en que se impuso Carlo de Gavardo, cuando corría en motos y en el Dakar africano.
El primer puesto obligará al curicano a abrir hoy la ruta, una tarea que la mayoría de las veces se torna complicada. "La estrategia para este domingo es empezar a atacar", advirtió.
Más estrellas
Ayer, por primera vez en su vida, Pablo Quintanilla corría una etapa del Dakar y su debut fue brillante: tercero. "Estoy totalmente sorprendido. Este era un lugar que me acomoda mucho, con mucha arena, yo vengo del motocross, no había que navegar mucho".
De todas maneras, el sanantonino no abre demasiadas esperanzas: "Tengo claro que es mi primer Dakar, quiero sumar experiencias, seguir aprendiendo, para ir formándome de a poco en el tema del rally, para pensar en años más en hacer algo importante".
Patricio Cabrera, por su parte, también debuta en una de las apenas cuatro Kawasaki en todo el Dakar. Y fue cuarto. Muy emocionado, dijo que "salimos y estaba lleno de gente por todos lados. Se nota que es una de las carreras más importantes del mundo. Pasamos dos pueblos y todo el camino estaba lleno. Estoy en un sueño y ahora que veo las clasificaciones que llego cuarto, la verdad que no me calza mucho y no entiendo".
El piloto coyhaiquino, de apenas 22 años, aseguró que "lo único que tenía en la cabeza es disfrutar del Dakar, ir tranquilo, quiero pasarlo bien en esta edición".
Los primeros sustos
La etapa de ayer no tuvo abandonos de chilenos, pero sí varios pasaron susto. Uno fue Jamir Ortiz, quien se cayó cuando se le cruzó un perro, llegando a Pisco. Encima, tuvo que partir la etapa cargando bencina, porque en la noche una manguera mal ajustada lo dejó sin combustible. Tampoco lo pasó bien César Zumarán, quien tuvo que llegar tirado por Rodrigo Illanes, luego de que fallara la bomba de bencina de su Honda.