Cyril Despres había abandonado KTM para arribar a Yamaha, con la idea de devolver el protagonismo a esa marca. Este año hizo el primer intento, pero el cinco veces ganador de la prueba ni siquiera arribó a la meta.

En enero, el francés aseguraba a La Tercera que "no me imagino que este proyecto se termine", por lo que se esperaba que volviera en 2015 con el equipo azul. Pero no será así, el vencedor de la edición 2013 se pasó a las cuatro ruedas y correrá por Peugeot, marca que regresa después de 25 años al clásico del todoterreno.

El otro nombre de la casa francesa también fue una sorpresa: el español Carlos Sáinz, bien identificado por Volkswagen y con alguna participación en buggies.

"Cuando uno pasa 10 horas arriba de la moto, tiene tiempo de pensar y la idea ya me daba vueltas en el último Dakar", dice ahora el galo.

Y agrega: "Tras abandonar el último Dakar, no podía imaginar ni por asomo que no regresaría al manillar de una moto, pero tuve la suerte de que me llamara Peugeot. Se trata de una oportunidad única para entrar en la categoría por la puerta grande, una de esas oportunidades que se presenta solo una vez en la vida. Ahora tengo que emplearme a fondo para tratar de ganar también en autos, sumándome a los pocos pilotos que han conseguido imponerse en la categoría después de ganar sobre dos ruedas", cerró Despres.

Sobre la partida del francés de las motos, Francisco López manifestó: "No es una ventaja para mí que él se pase a autos, este año no estuvo ni en el podio".