Pese a que en las últimas semanas Charlie Sheen, el actor mejor pagado de la TV estadounidense, a dado más de qué hablar por sus polémicas fiestas que por su trabajo, el actor no puede ser despedido de la serie Two and a Half Men.

Así lo indica el portal TMZ, donde apuntan a que en el contrato que existe entre el actor y Warner Bros no existe una "cláusula moral".

Se espera que Sheen vuelva a trabajar la próxima semana, luego del descanso obligado al que tuvo que someterse el resto del elenco y el equipo de grabación, debido a que Sheen tomó la decisión de rehabilitarse, en la privacidad de su hogar.