La capital francesa fue el lugar elegido por Charlotte Gainsbourg y Beck para poner en el mercado su primer trabajo musical en conjunto: IRM, un álbum que mezcla el folk-psicodélico con el pop y que llega hoy a las estanterías de París.

La placa, para la cual el músico estadounidense y la artista gala trabajaron durante dos años, incluye temas, como el dueto Heaven can wait, marcados por letras en inglés y los efectos de sonido carácterísticos de Beck, quien produjo y escribió la mayoría de las canciones.

Para Gainsbourg, de 38 años e hija del ícono de la canción francesa Serge Gainsbourg y la actriz británica Jane Birkin, esta no es su primera incursión en el el canto, sino que la tercera.

Su último disco, 5:55, fue lanzado en 2006 y en él tuvo la colaboración de diferentes personalidades de la música, como el dúo electrico Air y el productor de bandas como Radiohead, Nigel Godrich.

En su faceta como actriz, la estrella gala fue galardonada recientemente como Mejor Actriz en el Festival de Cine de Cannes, por su rol protagónico en la controvertida cinta Anticristo, de Lars Von Trier.

El sello discográfico de IRM, Because Music, comunicó que este álbum estará en todas las tiendas de Francia desde el lunes y en todo el mundo a partir de enero.