Chelsea anunció este jueves la suspensión temporal de acceso a su estadio de tres hinchas sospechosos de estar implicados en el incidente racista del martes en el metro de París, antes del partido contra el París Saint-Germain en la ida de octavos de la Liga de Campeones (1-1).
"Si se considera que hay pruebas suficientes sobre su implicación en el incidente, el club dictará una prohibición de por vida contra ellos", avisó el Chelsea en un comunicado, dos días después de que un video mostrara cómo hinchas del equipo londinense impidieron el acceso al metro a un hombre negro.
"Somos racistas, somos racistas y nos gusta", cantaron luego los hinchas de los 'Blues'. El club londinense fue ayudado por testigos para identificar a los culpables. "Queremos dar las gracias a muchas aficionados por darnos informaciones", dijo el equipo.
"Continuamos también cooperando plenamente con las fuerzas policiales de París y Londres en su investigación criminal", añadió.
La presunta víctima del acto racista del metro de París presentó una denuncia, confirmó este jueves a la AFP una fuente judicial. Los hechos, revelados en un video filmado por un viajero del metro y publicado el miércoles en la página web del diario británico The Guardian, han provocado una importante ola de indignación, especialmente en Inglaterra y Francia.
El presidente de la Unión Europea de Fútbol (UEFA), Michel Platini, declaró a la emisora francesa RMC que su organismo no puede sancionar ya que el acto tuvo lugar fuera de su jurisdicción.
"Podemos sancionar lo que pasa en un estadio o en el perímetro del estadio, pero fuera, en el metro, ¿qué quieren que haga? No tengo los medios para hacer nada", declaró.
"Sólo podemos recomendar a los clubes que pongan atención en sus aficionados y que eventualmente vean qué pueden hacer. Pero es difícil sancionar", añadió.