El ex vicepresidente de Estados Unidos, Dick Cheney, defendió hoy las técnicas "refinadas" que empleó la CIA en los interrogatorios a supuestos terroristas durante el gobierno anterior, al afirmar que éstas permitieron "salvar vidas".
Cheney aseguró en un comunicado que los documentos publicados ayer sobre los abusos que cometieron agentes de la CIA en algunos interrogatorios a sospechosos de terrorismo "claramente demuestran que las personas sometidas a las técnicas mejoradas de interrogación proveyeron la mayor parte de la información de inteligencia" que su Administración obtuvo sobre Al Qaeda.
Esta información "salvó vidas y previno atentados terroristas", insistió el ex vicepresidente estadounidense, quien agregó que los detenidos "también jugaron un papel en casi todas las detenciones de miembros y asociados de Al Qaeda desde 2002, según los documentos".
El lunes se difundió un nuevo informe en el que se reveló que la Agencia Central de Inteligencia (CIA) intimidó con pistolas y taladradoras eléctricas a sospechosos de terrorismo sometidos a interrogatorio y les amenazó con asesinar a sus familias.
El Departamento de Justicia de EE.UU. anunció además el nombramiento de un fiscal especial para que investigue los abusos cometidos por agentes de la CIA en esos interrogatorios y determine si hay evidencias suficientes para abrir un proceso criminal contra los responsables.
Sin embargo, para Cheney, la decisión del Fiscal General, Eric Holder, de ordenar una investigación criminal debería generar "dudas sobre la capacidad de esta Administración de asumir la responsabilidad sobre la seguridad" del país.
"Las personas involucradas (en los interrogatorios) se merecen nuestro agradecimiento. No merecen ser el objetivo de investigaciones políticas o procesamientos" judiciales, recalcó.
Las actividades de la CIA a la hora de poner en práctica las políticas de la Administración del ex presidente George W. Bush permitieron "destruir todos los esfuerzos de Al Qaeda" por lanzar más ataques contra EE.UU., afirmó el ex vicepresidente.
El presidente estadounidense, Barack Obama, ha ordenado la creación del Grupo de Interrogatorio de Detenidos de Alto Valor (HIG, por sus siglas en inglés), que tendrá su sede en la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), pero será supervisada por el Consejo Nacional de Seguridad, lo que saca el centro de gravedad de la CIA y permite vigilancia directa a la Casa Blanca.
En opinión de Cheney, los pasos dados por el actual Gobierno evidencian la razón por la que "tantos estadounidenses" dudan de la capacidad de la Administración Obama de velar por la seguridad nacional.