La selección chilena de balonmano cayó por 37-22 contra Croacia, en el Mundial de balonmano disputado en Francia.
En la ciudad de Ruan, los croatas de uniforme blanco reflejaron en la cancha su favoritismo de cara a este encuentro. A pesar de haber haber cercanía numérica en el marcador al comienzo del partido, pasados los cinco minutos de juego los europeos comenzaron a decretar su victoria.
A los 15' el tablero electrónico del estadio Kindarena marcaba un 10-6 en favor de los croatas. Tal como lo preveía el técnico español de la selección chilena, Mateo Garralda, ya a los 20' empezó a rotar al equipo. Entre estos cambios estuvo la salida del portero René Oliva por Felipe Barrientos, quien evitó notablemente que los europeos estiraran de manera abundante su ventaja. Barrientos atajó siete ocasiones claras en los últimos diez minutos del primer tiempo.
Ya en la segunda parte, Croacia mantuvo su compostura. Fueron capaces de anular el ataque chileno, robando balones en defensa y contragolpeando de manera efectiva.
La selección chilena jugará su quinto y último partido en fase de grupos contra Arabia Saudita a las 10.00. Solo una victoria puede ubicar a los nacionales en octavos de final, en lo que sería un hecho inédito para el balonmano chileno.