A dos meses de que fueran entregados los antecedentes de la causa, un expediente de más de 3.000 páginas y en un salón con cincuenta abogados, este jueves se llevó a cabo la audiencia por el caso de salvaguardias ante el Departamento de Defensa Comercial, DECOM, de Brasil en la capital de ese país.

En un encuentro que duró casi tres horas, los representantes del gobierno de Chile, encabezados por el embajador en Brasil, Jorge Montero, el jefe de Direcon Latinoamérica, Pablo Urria, y la abogada especialista en controversias comerciales internacionales del organismo, Andrea Cerda, tuvieron su espacio para entregar los argumentos del Estado para desestimar la medida proteccionista que fue anunciada en marzo de este año.

Desde la arista gremial, Federico Mekis, asesor legal de Vinos de Chile, junto a los abogados Ana Caetano y Rodrigo Pupo, del estudio jurídico que la asociación contrató en Brasil para este caso, expusieron además los puntos más relevantes de su defensa, que en primer lugar apunta a la falta de base y representatividad de la demanda, ya que los viñateros que la elevaron equivalen solo al 5% de la industria.

Además, aludieron a la falta de definición en temas centrales, ya que pese al estado de avance del proceso, la autoridad brasilera aún no define un aspecto básico, como lo es zanjar cuál es el producto investigado. "Todavía no se nos informa si el foco de la medida son los vinos producidos a partir de vitis vinífera o de vitis americana, cuestión que es esencial en este caso dada la acusación de la que somos objeto. De no definirse esto con justicia puede producir un resultado con mirada sesgada y eso lo discutiríamos hasta las instancias que nos abre la Organización Mundial del Comercio", comentó Mekis.

Como ha sido la tónica, la defensa de nuestros país ha mantenido contacto permanente con el resto de los representantes de otros países productores, como el Comité Europeo de Empresas del Vino (CEEV), organismo cuyos países representan un tercio del vino importado al igual que Chile, con el que se definieron criterios comunes para la defensa y para esta etapa de los alegatos.

Asimismo, se ha alineado con los sectores productivos de los países del Nuevo Mundo, como Estados Unidos y Australia que, pese a exportar poco vino, les urge que la defensa de libre comercio de los vinos en Brasil sea llevada hasta las últimas consecuencias, concordante con el pensamiento de los países que integran el Grupo Mundial del Comercio del Vino (World Wine Trade Group).

Tras el encuentro, los representantes de Vinos de Chile se mostraron optimistas por la contundencia de los argumentos, tras lo cual se reunieron con los abogados de importadores brasileros, quienes se han alineado en esta defensa al igual que los viñateros más grandes del país, las asociaciones de supermercados, de bebidas alcohólicas y restaurantes.

Ahora solo queda esperar, ya que pese a no existir una fecha definida, se estima que el veredicto podría oficializarse en septiembre.