Juan Antonio Pizzi lo tiene claro en su cabeza. A Uruguay hay que quitarle la pelota y someterlo. También hay que defenderse y minimizar los riesgos en los contragolpes y el juego aéreo, las dos mayores virtudes del equipo celeste.

La jornada previa al duelo de hoy comenzó con buenas noticias. Con Alexis Sánchez, Claudio Bravo y Arturo Vidal ciento por ciento recuperados de sus molestias físicas y, por tanto, aptos para ser titulares esta noche en el Estadio Nacional. Después, en el trabajo en la cancha, el estratega confirmó la oncena y enfocó los ejercicios en las pelotas detenidas y las transiciones. Primero con un trabajo de ataque y defensa aérea, con balonazos que caían sobre el área desde todos los sectores. Luego practicando los movimientos defensivos y la salida desde el fondo de la cancha.

Pizzi realizó un trabajo metódico, con muchas interrupciones. El DT entregó instrucciones entre cada ejecución. Cuidando los detalles. Minimizando los errores. Buscando la perfección.

La única duda que tenía el adiestrador era el reemplazante del suspendido Charles Aránguiz. ¿El elegido? Pablo Hernández que, según lo que se vio ayer en la práctica vespertina, será uno de los hombres más importantes para la correcta implementación del plan diseñado por el técnico para superar a los de Tabárez.

El Tucu participará de las jugadas defensivas, ubicándose cerca de los centrales para apoyar en las marcas y los despejes. Jean Beausejour y Arturo Vidal lo apoyaban en cada ejercicio. También el Tucu será, junto a Díaz, el desahogo del equipo. Encargado de sacar el balón desde atrás. Participará también del ataque. De hecho, en el ensayo de pelotas paradas ofensivas de ayer, el ex O'Higgins apareció varias veces en el centro del área, al lado de Vargas como un delantero más.

Chile también ensayó los pelotazos largos que llegarán directamente desde la zaga uruguaya. Ordenó cada movimiento en el retroceso y detuvo cada jugada que le generó disconformidad. Corregía, daba instrucciones, mostraba una pizarra, y otra vez a la cancha. Nada al azar.

Esta noche, cuando a la Roja le toque defender, Alexis será la referencia ofensiva y el principal agente para generar un contragolpe. En ese reordenamiento, Vargas y Fuenzalida serán los encargados de las carreras de apoyo.

El bicampeón de América sale esta noche a recuperar terreno. Ante un rival que exige al máximo y obliga a la aparición, una vez más, de la estirpe y jerarquía del equipo nacional.

Los tres puntos son vitales para las aspiraciones chilenas, ya que podrían comenzar a allanar el camino rumbo a Rusia. Lo sabe Pizzi, lo saben los jugadores y también los dirigentes. De hecho, ayer, Arturo Salah, timonel de la ANFP, junto al director Hugo Muñoz, se reunieron con el plantel para entregarles por última vez su apoyo.

La cita será a las 20.30 en Ñuñoa. La Roja puede confirmar hoy su recuperación luego del bajón que vivió tras la Copa América Centenario. Para sumar 20 puntos y finalizar el 2016 en zona de clasificación, contando los dos puntos por secretaría que otorgó la FIFA. El objetivo es ganar, porque de hacerlo, Chile estará con un pie en el Mundial. Sólo decirlo ya parece un sueño.

info-abre