"Cantamos juntos en un coro: él era bajo y yo tenor", recuerda el pastor suizo Kurt Gysel, sobre el paso por Santiago de Martín Junge (48), quien ayer se convirtió en el primer chileno -y latinoamericano- en ser escogido secretario general de la Federación Luterana Mundial, creada en 1947 y con representación en 79 países.

De padre chileno y madre austríaca, muy joven partió a estudiar teología protestante en Alemania. Tras regresar, en 1989 fue ordenado pastor de la Iglesia Evangélica Luterana de Chile, que reúne a 20 mil miembros. Junge (casado y con dos hijos) encabezó esta iglesia entre 1996 y 2000, año en que partió a Ginebra y se convirtió en el secretario para Latinoamérica y el Caribe de la federación.

"Sin cambios, sin innovación, ninguna organización sobrevive en el largo plazo", dijo en su discurso de aceptación. Su elección, por 37 votos contra cinco, fue bien recibida en el mundo religioso. Durante su estadía en Santiago, Junge se reunió en 1999 con Francisco Javier Errázuriz tras zanjarse en Alemania la disputa teológica por la "justificación por la fe". Además, visitó al entonces ministro de Defensa Edmundo Pérez Yoma, para mostrarse a favor de resolver temas pendientes de DD.HH.